El Gobierno asume el rechazo a las cuentas y sigue especulando con anticipar los comicios

El Congreso de los Diputados fue ayer el escenario de un intenso debate parlamentario entre el Gobierno y el resto de grupo a cuenta del proyecto de presupuestos generales del Estado que, según lo previsto, se somete hoy a su primera prueba de fuego en la Cámara baja. Sin embargo, todo parece indicar que el Gobierno socialista no va a contar con los apoyos necesarios para que sus cuentas pasen de la primera votación y se sigan tramitando. En este sentido, fuentes del Gabinete de Pedro Sánchez dieron ayer ya por hecho que ni ERC ni PDeCAT retirarán las enmiendas que han registrado contra el proyecto, lo que hará que el Gobierno pierda la votación y los presupuestos vuelvan a la mesa del Consejo de Ministros. En la misma línea, la número 2 del PSOE, Adriana Lastra, admitió que “lamentablemente los independentistas van a votar a favor de sus enmiendas”. Ante esto, el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, arremetió ayer contra PP, Ciudadanos, ERC y PDeCAT y los acusó de “vivir mejor en la confrontación”. “Tras siete años de injusticia social, las derechas y el independentismo votarán en contra de unos presupuestos sociales”, subrayó Sánchez, que también pidió “responsabilidad” a las fuerzas políticas para que España “siga avanzando”. En sintonía con Sánchez, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, lamentó, desde de la tribuna del Congreso, que el juicio del 1-O haya polarizado la negociación de los presupuestos para este año. “Me hubiera gustado que el debate presupuestario no se hubiese producido en esta semana de inicio del juicio del procés”, reconoció, porque la coyuntura ha impedido, a su juicio, un diálogo “serio y reflexivo”. No obstante, dejó claro que La Moncloa no va a ceder a “chantajes” y advirtió de que si los independentistas insisten en mezclar autodeterminación y presupuestos, “no habrá presupuestos”. Igualmente, Lastra tildó de “veto” a las cuentas “poner sobre la mesa la autodeterminación o la ingerencia en la Justicia”. En paralelo, la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, avisó de que si ERC y PDeCAT no apoyan los presupuestos “hay poco que hablar con ellos”. Por otra parte, Montero calificó a PP y Cs de “oposición dañina, destructiva, retrógrada y oportunista” por insistir, reiteradamente, en que se convoquen elecciones anticipadas. Pese a las palabras de la propia Montero, que advirtió al presidente de Cs, Albert Rivera, de que “este Gobierno seguirá gobernando” a pesar de su “ansiedad” por que se anticipen los comicios, lo cierto es que fuentes del Ejecutivo especularon ayer con tres fechas para llamar a elecciones generales. El 14 de abril sería “precipatado”, el 28 de abril haría coincidir la campaña con Semana Santa y Pascua. La última fecha, el 26 de mayo, generaría un “superdomingo” . En Catalunya, coindirían europeas, generales y locales. Sin embargo, en la mayoría de autonomías, también se acumularían sus respectivos comicios regionales.

En paralelo, el president de la Generalitat, Quim Torra, dijo que siempre defenderá el diálogo y que está “a disposición” de Sánchez para retomarlo. Asimismo, se preguntó que si la voluntad de dialogar mostrada por los socialistas era solamente por los presupuestos o para resolver el conflicto. “Tengo derecho a hacer esa pregunta”, remarcó, a la vez que afirmó que “estamos atornillados a la mesa de diálogo” pese a no saber aún la propuesta de Madrid para Catalunya.

PP y Cs urgen a convocar elecciones y Podemos afea la dejadez de Sánchez Los líderes del PP y de Cs, Pablo Casado y Albert Rivera, urgieron ayer al Gobierno central a convocar elecciones anticipadas. En este sentido, Casado exigió a Sánchez que no alargue la “agonía” y avance los comicios porque “España le ha quedado demasiado grande”. Además, aseguró que el proyecto presupuestario de los socialistas está “herido de muerte”. Igualmente, Rivera sostuvo que las cuentas de este año son la “gasolina” que necesita La Moncloa para “continuar negociando con los separatistas”. Así, reiteró que van a votar en contra de los presupuestos y confió en que, tras las elecciones, una mayoría “constitucionalista” evite una “futura alianza entre el sanchismo, los nacionalistas y los populistas”. Por otra parte, la portavoz de Unidos Podemos, Irene Montero, lamentó que Sánchez se haya rendido “antes de tiempo” y dé por perdidos los presupuestos. Asimismo, calificó de “grave irresponsabilidad” que los independentistas tumben las cuentas. Sin embargo, tanto ERC como el PDeCAT se reafirmaron en su negativa de retirar las enmiendas y permitir la tramitación. A este respecto, el diputado de ERC Joan Tardà auguró, tras escuchar las palabras de la ministra Montero, que “ha empezado la campaña electoral”. Asimismo, su compañero de filas Gabriel Rufián dijo que mantendrán la enmienda porque no van a legitimar a un Ejecutivo central “que no ha movido un dedo por miedo” para lograr la aprobación de los presupuestos. Mientras, el diputado del PDeCAT Carles Campuzano dijo que esperarán “hasta el final” para dialogar con los socialistas. En este sentido, su compañero Ferran Bel pidió regresar al jueves, cuando La Moncloa estaba abierta a “hablar de todo”. Campuzano subrayó también que “no será bajo la amenaza de elecciones con lo que lograrán que retiremos la enmienda”.