Cuixart y Forcadell son los últimos acusados en declarar en el Supremo

Los interrogatorios al líder de Òmnium, Jordi Cuixart, y a la expresidenta del Parlament Carme Forcadell podrán previsiblemente hoy punto y final a la declaración de los líderes independentistas procesados por su vinculación con el referéndum del 1-O. Ambos se enfrentan a una petición de pena del Ministerio Público de 17 años de prisión e inhabilitación absoluta como supuestos cabecillas de un presunto delito de rebelión. En cambio, la Abogacía del Estado pide una pena de 10 años de cárcel e inhabilitación absoluta para Forcadell por sedición y 8 años para Cuixart por el mismo delito. Sus voces, junto a las del resto de líderes sentados en el banquillo, podrán volver a ser escuchadas otra vez en el turno de última palabra al término del juicio. Mientras, se prevé que, completado el interrogatorio a Cuixart y Forcadell, mañana se dé inicio a la prueba testifical, con la comparecencia de, entre otros, del diputado de ERC Joan Tardà, del presidente del Parlament, Roger Torrent, del expresident Artur Mas, del exjefe del Ejecutivo central Mariano Rajoy, de su exvicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, o de su exministro de Hacienda Cristóbal Montero. Torrent ha solicitado al tribunal que cambie la fecha de su declaración debido a que coincide con un pleno programado en el Parlament. La sesión del jueves, que también estará dedicada a escuchar a los testigos acabará con la comparecencia del leridano Adrià Comella, director de CatSalut.

En otro orden de cosas, el cómico Toni Albà, recordando las palabras de Juan Carlos I tras un accidente mientras cazaba elefantes, aseguró ayer que “lo siento mucho, no volverá a ocurrir” en relación con el polémico tuit que escribió sobre el viaje de la líder de Cs en Catalunya, Inés Arrimadas, a Waterloo, mensaje que está siendo investigado por el Instituto de la Mujer. “En ningún caso pido disculpas”, añadió Albà, cuyas palabras fueron reprobadas por TV3 y por la productora de Polònia.

Toni Albà rectifica pero “no pide disculpas” a pesar de la reprobación de TV3 y de la productora de Polònia

Por otra parte, dos mandos policiales investigados por la actuación del 20-S frente a la sede de la CUP sostuvieron ayer que esperaban una orden judicial que nunca llegó para entrar en el local. También la Audiencia de Barcelona confirmó el archivo definitivo de la causa contra el exconseller Josep Huguet por un retuit de un mensaje contra la secretaria judicial del 20-S.

A partir de estas manifestaciones, los investigadores de la Guardia Civil han presentado al president como “elemento necesario” para conseguir el éxito de las aspiraciones independentistas y la “masiva movilización ciudadana”. Máxime cuando el presentador del acto en el que aparece Torra, Jordi Ferrer, se refería a Torra como “actor realmente imprescindible” del procés.

La Guardia Civil señala a Torra en un informe del 1-OUn informe de la Guardia Civil que ha sido presentado ante el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona sostiene que el ahora president de la Generalitat, Quim Torra, conocía que en 2016 que, “por debajo de la mesa”, el Govern de Carles Puigdemont estaba creando estructuras de Estado para la independencia de Catalunya. Torra, en un vídeo, explicaba que estas estructuras estaban amparadas por el Estatut “porque todavía estamos bajo legislación española” y que servirían para la celebración de un referéndum de autodeterminación “sin autorización del Estado”. Torra también animaba a la movilización a fin de crear un “escenario gandhiano” y una “tormenta política perfecta” para lograr la independencia. Asimismo, instaba a no dar “pasos atrás” y a “forzar” una votación sobre el futuro de Catalunya porque “España no la concederá nunca”. Igualmente, animaba a salir a la calle a manifestarse para que los “amigos de Podemos” no se lo pudieran mirar desde su casa y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, también se tuviera que movilizar al lado de los independentistas.