Mantienen las penas para los 8 jóvenes de Alsasua

La Audiencia Nacional ratificó ayer que la agresión a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua (Navarra) el 15 de octubre de 2016 no fue terrorismo, y mantiene las penas impuestas, de 2 a 13 años de cárcel a los 8 condenados. La sentencia desestima así el recurso planteado por la Fiscalía, que sí calificaba los hechos como terroristas, así como los planteados por las defensas salvo en un caso, el de Iñaki Abad, que fue sentenciado a 10 años de prisión y cuya pena ahora la Sala rebaja a 6 años al apreciar dos únicos delitos de lesiones y no los cuatro por los que fue condenado. En el resto de casos, confirma la sentencia inicial de 13 años de cárcel para Ohian Arnanz, 12 para Jokin Unamuno y Adur Ramírez, 9 años para Jon Ander Cob, Julen Goicoechea y Ararz Urriola y 2 años para Ainhara Urquijo, la única condenada que no ha ingresado en prisión.

La sentencia descarta que los hechos “puedan considerarse como actos de terrorismo, ni que los mismos se produjeran siguiendo el ideario que la banda terrorista ETA tenía entre sus objetivos”, pues los acusados “eran menores de edad” cuando la organización anunció que dejaba la lucha armanda.

Los guardias civiles creen que la sentencia confirma que la agresión no fue “una simple pelea”

En cuanto a reacciones, las familias de los ocho condenados afirmaron que la ratificación de la sentencia de la Audiencia Nacional “sigue ahondando en la injusticia y en el sufrimiento” y aseguraron que seguirán “peleando en los órganos judiciales y en la calle” contra estas condenas. Asimismo, el partido vasco Izquierda-Ezkerra, coalición integrada por Izquierda Unida y Batzarre, va a solicitar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que indulte a los jóvenes de Alsasua, después de conocer la sentencia.

Por su parte, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), personada en la causa como acusación popular, afirmó en un comunicado que esta sentencia confirma que la agresión “no fue una simple pelea de bar”, sino que tuvo como objetivo “el ataque a los guardias civiles por el mero hecho de serlo”.