PANORAMA
Torra ordena la retirada de los lazos amarillos y esteladas de los edificios de la Generalitat
Dice acatar la recomendación del Síndic, que había abogado por quitarlos durante la campaña electoral, pero no la orden de la Junta Electoral || Buscan alternativas para mantener visible la reivindicación
El president de la Generalitat, Quim Torra, ordenó ayer la retirada de los lazos amarillos y demás simbología independentista de los edificios de la Generalitat. La decisión llegó horas después de que el Síndic de Greuges, Rafael Ribó, le recomendara quitar estos símbolos de las fachadas de las instituciones de autogobierno hasta que finalice la campaña electoral. Ribó, que se pronunció sobre esta cuestión por petición del propio Torra, dejó claro, no obstante, que esta debe ser una “medida temporal y excepcional” que “únicamente tendría que tener vigencia durante el periodo electoral”. Así las cosas, Torra puntualizó que, con su decisión, no da cumplimiento a la “exigencia” de la Junta Electoral Central (JEC) sino que se limita a “seguir las recomendaciones de la Sindicatura de Greuges”. Sin embargo, a pesar de ordenar la retirada de los lazos, Torra podría ser sancionado igualmente por la JEC por haberlo hecho fuera del plazo. Por otra parte, según fuentes del Govern, Torra estudia una alternativa para que la fachada del Palau de la Generalitat no se quede vacía. En este sentido, una de las opciones es colgar una lona amarilla en el balcón principal o colocar luces amarillas. Otra pasaría por colocar una pancarta que haga referencia a la prohibición de la JEC de exhibir mensajes en favor de los líderes independentistas encarcelados y exiliados.
Horas antes, el Govern y la oposición habían protagonizado un nuevo rifirrafe en el Parlament, esta vez, precisamente, por la polémica sobre los lazos amarillos. Mientras que el president sostuvo que es la “libertad de expresión” la que ampara su colocación en los edificios de la Generalitat, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, le acusó de “fraude electoral” por no respetar la “limpieza de las elecciones” al no acatar los mandatos de la JEC. Así las cosas, el conseller de Exteriores, Alfred Bosch, salió al paso de estas palabras acusando al partido naranja de hacer un uso electoralista de la cuestión de los lazos. También el primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, señaló al Govern que “las leyes están para cumplirse, y cuando la JEC emite una resolución hay que acatarla y el resto es distracción”. Fuera ya del hemiciclo, el ex de CatComú y ahora candidato de ERC el 28-A Joan Josep Nuet apostó por quitar los lazos para no cavar “trincheras”.