Un teniente dice que Sànchez llevaba 'la voz cantante' el 20-S y que los Mossos 'acataban'

“Quién tomaba las decisiones era Sànchez y la intendente Laplana acataba”. Así de contundente se mostró ayer un teniente de la Guardia Civil, identificado con el número TIP B35974S, que compareció como testigo en el juicio contra la cúpula del procés en el Tribunal Supremo al declarar sobre los hechos acaecidos con motivo del registro policial en la sede de la conselleria de Economía el 20 de septiembre de 2017. De este modo, manifestó que el entonces presidente de la ANC, Jordi Sànchez, actuó, en aquella jornada, como “interlocutor de la masa”. “Llevaba la voz cantante y ejercía poder sobre la masa”, sostuvo el teniente, a la vez que aseguró que el también diputado de JxCat en el Parlament rechazó todas las propuestas que le planteó la Guardia Civil y se negó a colaborar. Además, este teniente también explicó ante el tribunal del 1-O que dos mossas le advirtieron de que, si pretendían salir del edificio con las cajas de la documentación recabada en el registro, los concentrados “nos matarían o nos masacrarían”. En este sentido, dijo que no veía seguro el pasillo formado por voluntarios de la ANC y de Òmnium para salir de la sede. “El pasillo de voluntarios, en una manifestación pacífica, es suficiente, pero en aquella manifestación este no era el caso”, enfatizó.

Por otro lado, aseguró que en los coches aparcados junto a la conselleria de Economía y que quedaron dañados durante la concentración independentista en protesta contra el registro había armas largas para “munición real”. De esta manera, contradijo la declaración efectuada como testigo hace unos días por el exjefe de la Guardia Civil Ángel Gozalo ante el Supremo. En su testifical, Gozalo sostuvo que las armas que se encontraban dentro de los vehículos servían para disparar “pelotas de goma”. El agente también remarcó que “tuvimos que aguantar la puerta de la conselleria de Economía para que la masa no la derribara”.

En paralelo, otro teniente de la Benemérita, identificado como TIP C57393S, calificó de “esperpéntico” gestionar el dispositivo de seguridad del 20-S con Sànchez, aunque admitió que no se lo recriminó a los Mossos. Además, reveló que los agentes valoraron la posibilidad de activar un helicóptero para evacuar a la secretaria judicial Montserrat del Toro del interior del edificio ante la “situación de crisis”. El agente, que ahora ha obtenido el grado de capitán de la Guardia Civil, también reconoció que no se intentó ni una sola vez salir de la sede de conselleria. A este respecto, explicó que “haberlo hecho habría sido una negligencia” y añadió que las opciones que les dieron los Mossos no eran “seguras”.