Juicio del 'procés'
Un policía dice que un letrado de la defensa dificultó su acción el 1-O
Un inspector de Policía ha relatado en el juicio del 'procés' que un letrado de la defensa, que ayer un compañero suyo identificó como Andreu Van den Eynde, ralentizó su actuación el 1-O al tomarse su tiempo para leer de arriba a abajo el auto que ordenaba impedir el referéndum, declarado ilegal: "Se hizo eterno el tiempo". "Lo leyó entero", ha señalado el agente en el juicio del "procés", donde ha precisado que el abogado "hizo valer su condición de letrado" y pidió expresamente el auto que ordenaba la actuación de la Policía.
Aunque en ningún momento el inspector se ha referido a él por su nombre, otro agente de Policía identificó ayer a Van den Eynde, letrado de Oriol Junqueras y Raül Romeva, como la persona que intentó mediar en un colegio de Barcelona el 1 de octubre.
El episodio ocurrió en la Escola Dolors Monserdà, de Barcelona, donde Van den Eynde, que era la única persona que estaba de pie y no sentado como el resto, mostró "el carné del Colegio de Abogados de Barcelona" y pidió el auto. Al sentirse en la obligación de "hacer saber sobre qué fundamentos jurídicos" actuaba la Policía, el inspector, que aquella jornada coordinaba el área de Información en el Distrito V de Barcelona, el de Sarrià-Sant Gervasi, ha precisado que se le dejó leerlo.
Para él "era una situación incómoda", porque tenían la necesidad de actuar lo más rápido posible y el abogado "se tomó su tiempo". "Se hizo eterno el tiempo con él y le pedí que por favor me lo devolviera", ha relatado el policía. Cuando se retiró a la gente, comprobó que el abogado no se iba, por lo que le dijo que "no pintaba nada allí porque ya se le habían dado las explicaciones".
El testigo también ha relatado otro episodio, en este caso en la Conselleria de Educación, donde la entonces responsable, Clara Ponsatí "gritaba mucho y no se soltaba" de su escolta, un mosso d'Esquadra a quien estaba "agarrada". Según el inspector, Ponsatí, huida en Escocia y a quien varios agentes han identificado ya en ese colegio, fue "completamente resistente a la intervención" y "puso muchas dificultades".
Por su parte, su escolta también estaba entrelazado de otro hombre, que "aparentaba" tener el protagonismo y tras conseguir separarles, algo que según el agente "costó mucho", el mosso se puso en pie. "Empieza a decir 'compañeros, compañeros', se echa la mano al bolsillo y se identifica", ha explicado el agente, que ha añadido: "Era una placa emblema de Mossos y se identificó como escolta de Ponsatí".