REPORTAJE
Tarrés, un pueblo comprometido
Pese a ser un pueblo pequeño, el menos poblado de Les Garrigues junto con Fulleda, los habitantes de Tarrés tienen un fuerte compromiso político, consideran las elecciones como algo en lo que hay que implicarse y, por esta razón, el índice de participación es uno de los más altos de Lleida ya que ronda el 80%.
En las generales de 2016 votó un 79,01% de la población y en esa ocasión ganó la antigua CDC que obtuvo 28 sufragios frente a los 27 que contabilizó ERC. En las de 2015 fue del 78,75% y el triunfo se lo llevó Democràcia i Llibertat. La antigua Convergència obtuvo 32, 25 ERC, 5 En Comú, 3 PSC y uno Cs. En 2011 la participación fue del 79,79%. Ganó CiU con 44 votos, ERC le siguió con 16, PSC con 6, PP con 5 y ICV con 1. “Los partidos de derechas tienen pocos seguidores por estas latitudes. No creo que haya nadie de VOX, la ultraderecha no tiene cabida aquí”, aseguran los vecinos. “Todos tenemos clara nuestra opción y la convivencia es muy buena”, añaden. A tenor de las personas consultadas, las formaciones nacionalistas volverán a ser hegemónicas el 28-A. Según su alcalde, Tarrés es una población con una realidad dual. Hay pocos payeses, la mayoría están jubilados y trabajan en el campo como actividad complementaria. Los habitantes de Tarrés trabajan fuera en servicios e industrias. “Como yo (es técnico en el consell comarcal), tienen sus trabajos en otras localidades pero vivimos en el pueblo porque es calidad de vida”, remarca.
En las últimas municipales de 2015 el partido de Arbós, Treballen per Tarrés. Fem Poble Acord Municial logró mayoría absoluta y 5 concejales. La participación fue de un 78,16%. Arbós lleva 12 años como primer edil. Aunque el alcalde asegura que en la actualidad se ha conseguido frenar el receso en la población ya que a fecha de hoy hay 110 vecinos, el censo oficial previo a las elecciones la fija en 99 habitantes, lo que comporta una reducción de 5 a 3 en el número de ediles a elegir en las elecciones locales del 26M. Sin embargo, Tarrés sigue apostando por proyectos de futuro como la puesta en marcha el próximo mes de septiembre de una de las primeras ‘escoles bosc’ de Lleida que darán trabajo a dos personas y que devolverá la actividad educativa al municipio que perdió la escuela hace 40 años. “Tendremos 16 niños en el centro, lo que para el pueblo es muy importante ya que es una opción muy atrayente”, dicen los vecinos. Tarrés insiste en reivindicar su memoria histórica para dignificar la fosa común donde hay enterrados 25 soldados republicanos y 4 italianos para remarcar su trayectoria.