Último adiós a Alfredo Pérez Rubalcaba, que fue incinerado ayer en una ceremonia íntima

Poco después de las dos de la tarde de ayer, el féretro con los restos mortales del exvicepresidente del Gobierno central Alfredo Pérez Rubalcaba traspasó la Puerta de los Leones del Congreso de los Diputados a hombros de agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil. Un silencio únicamente roto por los aplausos de los centenares de ciudadanos que aguardaban el momento para dar su último adiós al exlíder de los socialistas se apoderó de la Carrera de San Jerónimo de Madrid. Durante las horas que duró el velatorio en el salón de los pasos perdidos del Palacio del Congreso, más de 8.000 personas desfilaron ante el féretro de Rubalcaba. Asimismo, numerosas personalidades también rindieron sus respetos al que fue definido como defensor de la democracia y de la libertad. Los reyes eméritos, Juan Carlos I y Sofía, la infanta Elena, el expresidente del Gobierno central Felipe González, el exvicepresidente Alfonso Guerra, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, la exsocialista Soraya Rodríguez o el líder de Cs, Albert Rivera, fueron algunos de los que se dejaron ver ayer en el velatorio de Rubalcaba. También el presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, o la presidenta del Congreso, la popular Ana Pastor, pasaron horas ante el ataúd, al igual que lo hicieron ya en la noche del viernes. En representación de los independentistas catalanes, el presidente del PDeCAT, David Bonvehí, y la exsenadora Marta Pascal mostraron sus respetos a Pilar Goya, viuda de Rubalcaba. Igualmente, visitó la capilla ardiente el primer ministro de Portugal, el también socialista António Costa.

Todos lo que lo desearon pudieron dejar estampadas sus condolencias en un libro que se colocó en el patio del Congreso. Otro fue emplazado en el interior de la Cámara baja, reservado para los familiares y representantes institucionales que gustaron despedirse por escrito del histórico político socialista.

Instalan dos libros para que puedan dejar por escrito su último adiós ciudadanos y personalidades políticas

Después de finalizar el velatorio en el Palacio del Congreso, los allegados del exdirigente del PSOE se dieron cita en una ceremonia de despedida, que se celebró en la más estricta intimidad por deseo expreso de la familia. A continuación, los restos mortales del exvicepresidente socialista Alfredo Pérez Rubalcaba Rubalcaba fueron incinerados.

Un hombre arroja papeles al féretro y exige hablar con Pedro Sánchez Uno de los ciudadanos que acudieron a visitar la capilla ardiente de Alfredo Pérez Rubalcaba lanzó algunos papeles frente al féretro del político socialista y exigió reunirse con el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, que estaba presenciando la escena a pocos metros de distancia. En ese momento, el también secretario general del PSOE se levantó de su asiento y se dirigió a este ciudadano. Entonces, lo agarró del brazo y lo trasladó a una estancia adyacente para hablar con él. Tanto el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como la número 2 de los socialistas, Adriana Lastra, acompañaron a Sánchez en su breve encuentro con este hombre. Según fuentes del Ejecutivo central, la intención de este ciudadano era hacer llegar al jefe del Gobierno una cuestión judicial que le afecta. El incidente terminó sin problemas y Sánchez se reincorporó al velatorio minutos después.