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Unitat d’Aran recupera el Conselh con nueve de los trece escaños

CDA se queda con cuatro y ni Aran Amassa ni Cs logran representación

Paco Boya recibe la felicitación de simpatizantes y vecinos frente a la sede de Unitat d’Aran tras ganar por mayoría en el Conselh.

Paco Boya recibe la felicitación de simpatizantes y vecinos frente a la sede de Unitat d’Aran tras ganar por mayoría en el Conselh.CLARA VILLAR/AUÈ TV

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Solo una vez con anterioridad desde la recuperción de las instituciones aranesas hubo una mayoría tan marcada como la que ayer logró Unitat d’Aran para el Conselh Generau. Como hizo CDA en 1999, UA consiguió ayer nueve de los 13 conselhèrs del pleno, lo que supone que Paco Boya volverá a ser investido Síndic de Aran en sustitución del convergente Carlos Barrera, que ha estado al frente de la institución durante 20 años de forma interrumpida. Convergència Democràtica Aranesa se queda solo con cuatro escaños, frente a los 7 que tuvo durante el último mandato. Boya ya fue Síndic de Aran entre 2007 y 2011 y ahora lo será de nuevo sin necesidad de apoyos, ya que en aquella ocasión gobernó gracias al respaldo del Partit Renovador d’Arties e Garòs. La formación socialista, aliada con el PSC (de hecho, Boya forma parte de la ejecutiva del PSOE de Pedro Sánchez) vivió ayer una noche de euforia al compás de la llegada de los resultados. Además de las elecciones al Conselh, las de los ayuntamientos les fueron favorables y ganaron en seis de los nueve ayuntamientos, en todos ellos (Les, Bossòst, Canejan, Es Bòrdes, Vilamòs y Vielha), con mayoría absoluta. Logró también el voto mayoritario en cinco de los seis terçons y en el sexto (Arties e Garòs) la mayoría fue para CDA.

Al margen de UA y CDA, el PRAG perdió su representación en el Conselh, en el que había tenido un escaño en las cinco elecciones anteriores desde las de 1999. De esta forma, la corporación aranesa será más bicolor que nunca, curiosamente, en el año en que se han presentado un mayor número de candidaturas, con hasta 24. Tampoco obtuvo representación la candidatura de izquierdas y asamblearia encabezada por Mireia Boya, Aran Amassa, y tampoco lo hizo Ciudadanos ni Unidas Podemos, que concurría por primera vez al Conselh Generau. Aran Amassa logró cuatro concejales distribuidos en los ayuntamientos de Les, Bausen y Naut Aran y Vielha, lo que la convirtió en la tercera fuerza en el valle, según remarcó la propia Boya a través de las redes sociales.

El próximo Conselh de Aran podría constituirse el 18 de junio, un día después de la fiesta nacional de Aran. Será el octavo Conselh desde la aprobación de la ley de Aran y la recuperación de la corporación comarcal.

El próximo gobierno de Unitat d’Aran tendrá que hacer frente a un mayor despliegue de la nueva ley aranesa, en vigor desde el año 2015. La crisis y la aplicación del artículo 155 de la Constitución como respuesta al ‘procés’ frenaron los avances en esta materia.

La situación del aranés, cuya defensa ha llegado a la comisión de peticiones de la UE, es una de las materias pendientes y también la solución para el elevado tráfico pesado de la N-230. En este sentido, Boya se ha pronunciado recientemente a favor de regular el tráfico a través de una viñeta.

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