ELECCIONES
El batacazo de Podemos frena a la izquierda en el reparto territorial
Iglesias critica a Errejón entre presiones contra su liderazgo|| El PSOE pide el fin del cordón sanitario a Cs, que decidirá posibles pactos o apoyos en cada territorio
Iglesias era ayer la cara de la decepción por los resultados del 26M.
El partido de Pablo Iglesias ha perdido más de un millón de votos (1.124.542 votos) en los comicios autonómicos que han tenido lugar el domingo en 12 comunidades, lo que ha dejado a Podemos con 664.000 apoyos en estas regiones y 41 diputados, 64 menos de los 105 parlamentarios regionales que tenían. Además, han perdido toda representación en los parlamentos de Cantabria y Castilla La Mancha. Si los de Iglesias e Iñigo Errejón hubieran ido juntos en Madrid habrían logrado 61 diputados en lugar de 41. Son solo algunas cifras que demuestran la importancia del golpe que han supuesto las elecciones para la formación morada, tanto que sectores críticos piden ya la dimisión del tándem Pablo Iglesias-Irene Monteroy exigen la celebración de una asamblea ciudadana (un Vistalegre III) para elegir una nueva dirección nacional.
Pablo Iglesias reconoció ayer que uno de los desafíos de cara al futuro es solucionar la “mala implantación territorial” de la formación morada que les ha llevado a perder apoyos. Pese a ello, descarta dimitir y dice que le queda “mucho por hacer al frente de Unidas Podemos”. Todo ello sin ocultar sus reproches a Errejón, al asegurar que diferentes partidos de izquierdas que concurrían en el Ayuntamiento de Madrid y en la Comunidad deben dejar de lado los “proyectos personalistas” y abogar en un futuro por candidaturas “en las que esté todo el mundo”.
El PSOE quiere un gobierno de orientación socialista con independientes y progresistas
En PSOE, entre tanto, no quiere dar ningún gobierno por perdido y asegura que “lo vamos a pelear todo”, en palabras ayer del secretario de Organización, José Luis Ábalos. En la línea de Pedro Sánchez en la noche electoral, hizo un llamamiento de Ciudadanos a levantar el cordón que había impuesto descartando cualquier pacto con el presidente del Gobierno. Pero también tuvo un mensaje para Pablo Iglesias, cuando dijo tras la reunión de la Comisión Ejecutiva de su partido que quieren un Gobierno “de orientación socialista” abierto a independientes y progresistas.Lo dijo tras la insistencia horas antes del líder de la formación morada de negociar un Gobierno de coalición con Pedro Sánchez pese a los malos resultados de su partido.
El número tres del PSOE hizo un llamamiento a Ciudadanos a que apliquen en comunidades autónomas como Castilla y León y Murcia el mismo principio que utilizaron en Andalucía y que dio el gobierno al PP a pesar de la victoria socialista. En este sentido, recordó que la formación de Albert Rivera alegó la necesidad de un “cambio de régimen”.
Por su parte, Inés Arrimadas, que ayer se supo que será la nueva portavoz de Cs en el Congreso, evitó adelantar cuál será la política de pactos que aplicará su partido tras las elecciones municipales y autonómicas, que un comité nacional coordinará junto a los representantes de Cs en los distintos ayuntamientos y comunidades.
