POLÍTICA DIÁLOGO
Sánchez desoye la oferta de Aragonès y pide no poner “falsos muros” en un mundo global
Clausura la XXXV Reunión del Cercle d’Economia en Sitges sin hablar ni del ‘procés’ ni de los pactos para formar Gobierno || Subraya que abordará un nuevo Estatuto de los Trabajadores para el siglo XXI
El presidente del Gobierno central en funciones, Pedro Sánchez, puso ayer el punto y final a la XXXV Reunión del Cercle d’Economia celebrada en Sitges. A diferencia del vicepresident de la Generalitat, Pere Aragonès, que el sábado tendió la mano a Madrid para recuperar la declaración de Pedralbes firmada en diciembre del año pasado y negociar un nuevo modelo de financiación para Catalunya, Sánchez no hizo mención alguna ni al procés ni a las negociaciones con los demás partidos para lograr la investidura y cerrar los Ejecutivos autonómicos y locales que están todavía en el aire. De esta forma, el también líder de los socialistas centró su intervención en trasladar a los empresarios allí reunidos los grandes ejes programáticos que ha preparado para los próximos cuatro años y que pasan por la que denominó “agenda del cambio”. Este plan, según explicó Sánchez, se compone de “siete líneas de trabajo” que son la productividad, la formación del capital humano, la transición ecológica, la promoción de los avances científicos, la creación de empleo, la reducción de la desigualdad y el aumento de la calidad institucional. “España ha dicho en las urnas que quiere avanzar, y que lo quiere hacer con justicia social”, defendió el presidente español, a la vez que manifestó que “le tenemos que decir a la gente que no es hora de cambiar de país, sino de cambiar el país, porque aquí hay oportunidades”. Sánchez, que se arrancó con un “España es el mejor país en el que nacer”, indicó que Europa “es nuestra otra patria” y que, en un mundo globalizado, no tiene sentido levantar “falsos muros”. “Con Europa compartimos valores. Europa no tiene que imitar a los Estados Unidos o a China, sino que debe marcar su propio liderazgo”, enfatizó. Por otra parte, abogó por redactar un nuevo Estatuto de los Trabajadores del siglo XXI para “anticiparse” a los cambios en el modelo productivo y de las relaciones laborales. Al hilo de esto, se refirió a las condiciones de trabajo de los empleados de plataformas como Glovo o Deliveroo, y recordó la muerte de un repartidor el viernes de la semana pasada en Barcelona. “Es a estas condiciones laborales a las que tenemos que dar respuesta”, concluyó. Mientras que Sánchez desoyó la oferta de Aragonès, las palabras del vicepresident no cayeron en saco roto para el alcadable socialista de Barcelona, Jaume Collboni, que arremetió contra los republicanos por haber vetado al primer secretario del PSC, Miquel Iceta, como presidente del Senado, y haber bloqueado la aprobación de los presupuestos generales. “Mi nivel de credibilidad de las palabras de Aragonès es cero”, remarcó, y afirmó que algunos dirigentes de ERC “hacen discursos para gustar a la audiencia”.
Los empresarios lamentan el fin del bipartidismo y abogan por pactosEl presidente del Cercle d’Economia, Juan José Brugera, reclamó ayer al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, profundizar en la “cultura de la negociación y el pacto” para dar salida al conflicto entre Madrid y la Generalitat. “No estamos condenados al fatalismo, hay vías de salida”, aseguró Brugera, a la vez que invitó a Sánchez a reformar el modelo territorial. En este sentido, sostuvo que “la fragmentación política ha enterrado el bipartidismo imperfecto que tanto facilitaba la gobernabilidad”. Así las cosas, se posicionó a favor de un nuevo modelo que beneficie a las comunidades autónomas. Por otra parte, Brugera indicó que en España “a pesar del buen comportamiento macroeconómico, la cifra de desempleo sigue resultando inaceptable”. En la misma línea, añadió que sucede lo mismo con la precariedad y el deterioro de las condiciones laborales, una situación que acusan sobre todo los jóvenes y que se ha venido manteniendo desde la crisis.