Valls carga contra la estrategia “sectaria” de Ciudadanos por pactar con los ultras de Vox

El ex primer ministro francés y regidor de Barcelona pel canvi, Manuel Valls, confirmó ayer su firme intención de seguir ejerciendo su cargo en el ayuntamiento de Barcelona y cargó contra Ciudadanos, formación con la que rompió su coalición a principios de semana. Valls señaló que la estrategia tomada por la formación de Albert Rivera es “sectaria” y equivocada ya que “provoca el sentimiento de que se debe sacrificar Catalunya por ventajas electorales en el resto de España” y que hace un año le parecía que la formación naranja era “liberal, progresista y centrada”. Pero considera que el cambio de rumbo que está tomando Albert Rivera es “equivocada y peligrosa” ya que apuesta por el “cuanto peor, mejor” ya que considera que el partido se está acercando a una “deriva grave” aferrándose a los pactos con los ultraderechistas de Vox y con su estrategia contra el independentismo.

Valls también descartó que pretenda crear un nuevo partido en Catalunya, remarcando que se encuentra en un periodo de “reflexión” y prefiere servir de ayuda a los partidos que ya están constituidos. Respecto a la decisión del exministro socialista, Celestino Corbacho, de retirarle su apoyo para unirse a Cs, Valls aseguró que la “respeta”, aunque lo calificó “de incomprensible” y aseguró que tanto él como Eva Parera seguirán ejerciendo de concejales desde una “posición modesta”.

Asegura que tendrá libertad de voto en el ayuntamiento y que será miembro de la Diputación de Barcelona

Ante estas declaraciones la portavoz de Cs, Inés Arrimadas, replicó que su formación no acepta lecciones sobre la defensa del constitucionalismo. “Nos hemos partido la cara por Catalunya. Hemos recibido amenazas de muerte y agresiones, afirmó. Arrimadas también criticó que Valls ofreciera su apoyo a Ada Colau, a la que se refirió como “una de las personas más sectarias y populistas de España”. La diputada de la formación naranja también defendió que situar a Colau como alcaldesa de Barcelona es “tan mala idea” como poner a Ernest Maragall al frente del consistorio. Y aseguró que la alcaldesa de Barcelona ha dado la razón a su formación con su decisión de volver a colgar el lazo amarillo en la fachada del ayuntamiento 48 horas después de tomar posesión de su cargo.

Por otro lado, Celestino Corbacho aseguró que tendrá libertad de voto en el ayuntamiento, aunque aseguró que espera no tener que votar diferente que sus compañeros. Corbacho también confirmó que ha acordado con Cs que será miembro de la Diputación de Barcelona, ya que es una institución que conoce a fondo.

PAMPLONA

Un pacto de última hora alcanzado por los socialistas y los nacionalistas navarros dio ayer la presidencia del Parlamento de autonómico a Geroa Bai y facilitó que EH Bildú entrara en la Mesa de la Cámara, aunque sin los votos de los socialistas, que presentarón a su propia candidata. En la constitución de la mesa del Parlamento navarro, Geroa Bai consiguió la presidencia, el PSN una vicepresidencia y EH Bildu una secretaría. Los otros dos puestos fueron para Navarra Suma (UPN, PP y Cs). Poco antes de las votaciones, PSN y Geroa Bai habían dado por rotas las negociaciones por sus discrepancias en torno a EH Bildu, pero finalmente lograron solventarlas minutos antes.

La composición del futuro Gobierno de Navarra y las decisiones que adopten los socialistas de esta comunidad resultarán claves para que Pedro Sánchez recabe apoyos de cara a su próxima investidura como presidente del Gobierno. El acuerdo de los socialistas con Geroa Bai les aleja de Unión del Pueblo Navarro (UPN), que había planteado abstenerse en la investidura de Sánchez si no se pactaba con EH Bildu en la conformación del Gobierno de Navarra.

El candidato de Navarra Suma a la Presidencia del Gobierno foral, Javier Esparza, manifestó que “desgraciadamente hay un acuerdo entre el PSOE y EH Bildu” en Navarra y señaló que “es inmoral que el PSN pretenda liderar esta Comunidad con la abstención de EH Bildu”.

Sánchez ofrece a Podemos cargos intermedios pero no ministerios La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, dejó claro ayer que Pedro Sánchez ofreció al secretario general de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, que cargos de su formación formaran parte de “puestos de responsabilidad importante”, pero acto seguido aseguró que en ningún momento se ofreció ningún ministerio. “La oferta que ha hecho el presidente no está ubicada en el Consejo de Ministros”, dijo Calvo, sino en responsabilidades “políticas y administrativas importantes”. La vicepresidenta instó así a Unidas Podemos a contestar “si le convienen o no a sus objetivos que sigamos trabajando en políticas socialistas progresistas”. Por su parte, la portavoz de Podemos en el Congreso, Irene Montero, continuó insistiendo en un acuerdo de gobierno “completo” con el PSOE que implique “negociarlo todo”, es decir, los programas y también los equipos, y volvió a defender la entrada de Unidas Podemos en el Gabinete Ejecutivo.