INSTITUCIONES EUROPEAS
La UE no encuentra solución para el reparto de sillones
Países del Este, Italia y el PPE rechazan a Timmermans|| Pese al acuerdo de Alemania, España, Francia y Holanda
Antonio Tajani conversa con Donald Tusk durante la cumbre.
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea continuarán hoy martes las negociaciones para el reparto de los altos cargos de las instituciones comunitarias, ante las dificultades para lograr un equilibrio satisfactorio para las tres principales familias políticas tras más de 24 horas de contactos bilaterales y negociaciones fracasadas a Veintiocho en Bruselas.
El presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, tomó la decisión de “suspender” la cumbre extraordinaria que arrancó el domingo en la capital europea y retomarla hoy por la mañana, según informó su equipo. El aplazamiento responde a la necesidad de dar más tiempo para salvar las diferencias que alejan a populares, socialistas y liberales y tratar de romper el punto muerto en el que se encuentra la situación.
Los Veintiocho retoman hoy su reunión para intentar zanjar los nuevos cargos
La canciller alemana, Angela Merkel, afirmó que la oposición del denominado Grupo de Visegrado –Hungría, Polonia, República Checa y Eslovaquia– y de Italia a las propuestas para el reparto de cargos, así como el rechazo del Partido Popular Europeo (PPE) al compromiso que presentó antes de la cumbre del G20 en Osaka (Japón) junto con Francia, España y Holanda impidieron a los líderes encontrar un acuerdo.
La idea planteaba dejar a l socialista Frans Timmermans la presidencia de la Comisión Europea. Para el resto de cargos (la presidencia del Parlamento Europeo, del Consejo Europeo, el alto representante de la UE y el BCE), se proponía a políticos conservadores y liberales, con la intención de satisfacer las demandas de esos grupos. Sin embargo, la propuesta planteada ayer por Tusk se topó con la oposición frontal del Grupo de Visegrado debido a que Timmermans, vicepresidente primero de la actual Comisión, ha encabezado durante la legislatura las advertencias a Budapest y Varsovia por sus problemas con el Estado de derecho. Además, el PPE dejó claro durante una reunión previa a la cumbre que no estaba dispuesto a renunciar tan fácilmente a la presidencia del Ejecutivo comunitario.
