SOCIEDAD
El CNI tenía al imán de Ripoll como confidente hasta el 17-A y conocía las actividades de la célula, según 'Público'
Según 'Público', eso demuestra que los servicios secretos seguían los movimientos de los miembros de la célula
El CNI tenía al imán de Ripoll como confidente hasta los atentados y conocía las actividades de la célula, según el diario 'Público'. El medio aporta un correo electrónico donde habría comunicaciones dos meses antes del 17-A, y asegura también que no fue hasta por la mañana siguiente de la masacre cuando se borró del registro central de fuentes del CNI la ficha de Abdelbaki es Satty. También muestra un informe donde se explica un viaje para comprar un vehículo de segunda mano a finales del 2016. Según 'Público', eso demuestra que los servicios secretos seguían los movimientos de los miembros de la célula.
El medio muestra el correo 'adamperez27177@gmail.com', que sería lo que utilizarían el imán y el CNI para comunicarse, a través de la técnica del 'buzón muerto'. Los correos no se envían, sino que se dejan como borrador. Para leerlos hay que entrar en el correo con las claves correspondientes. El hecho de no enviar nada hace que la comunicación no deje rastro. Según explica 'Público', la contraseña del correo se encontró en un papel manuscrito encontrado entre los restos del chalet de Alcanar y era PEREJUAN18.
Había dos mensajes en la carpeta de borradores y la última modificación de la configuración de la cuenta es de marzo del 2017. El primer mensaje es del 24 de mayo del 2017 y dice: "Veo que has podido entrar, sólo tienes que dejar escrito un mensaje como este como borrador y yo lo leeré. Ya puedes empezar a escribir cosas. Gracias amigo".
El diario concluye que este mensaje parecería del agente del CNI que controla Es Satty y que este correo lo habría creado él para comunicarse con el imán de Ripoll. El segundo borrador es del 19 de junio del 2017, unos días más tarde y apunta: No tienes nada para escribirme o es que no puedes hacerlo. Hoy es el lunes 19 de junio". Todo eso sucede mientras los miembros de la célula fabrican los explosivos en Alcanar, extremo que confirma el testimonio del único superviviente de la deflagración.
Por otra parte, el medio muestra un informe donde se hace seguimiento de los movimientos de los miembros de la célula antes de los atentados, en diciembre del 2016, y asegura que el CNI conocía su actividad de forma previa. Los servicios secretos, continúa, conocían sus itinerarios y medios de desplazamiento y sabían con anterioridad sus planes. Entre los documentos que muestra 'Público' hay un informe donde explica que el objetivo de un viaje en concreto era que Mohamed Hichamy comprara a Friburg, en Alemania, un coche de segunda mano, "hecho que finalmente no se produjo".
Según el diario, el CNI sabía lo que los terroristas pretendían hacer porque estaba escuchando lo que hablaban entre ellos. "Al no comprar el automóvil, se ven obligados a buscar un medio de transporte para la vuelta. Así, Mohamed Hichamy contactó con Younes Abouyaaqoub y le solicitó que les reservara un vuelo de vuelta", apunta este mismo informe. Otro de los apuntes del documento subraya: "En este traslado utilizan el vehículo utilizado para el atentado de camarines, cuyo titular es Mohamed Aalla, pero utilizado con frecuencia por varios miembros de la célula para sus desplazamientos entre Ripoll y Alcanar".
Eso permite concluir en 'Público' que el servicio secreto conocía el continuos tráficos por carretera entre Ripoll y Alcanar, y de hecho asegura que seguía vigilando y controlando a los terroristas hasta el mismo día del atentado.