TRIBUNALES TRAGEDIA
Piden 3 años de prisión para el dueño de la finca de Totalán
En la que se hallaba el pozo donde murió el pequeño Julen
La Fiscalía ha solicitado tres años e cárcel para el dueño de la finca de la localidad malagueña de Totalán David Serrano, en la que murió Julen, el niño de dos años que cayó a un pozo y cuyo cuerpo fue rescatado 13 días después, al considerar que los hechos son consecutivos de un delito de homicidio por imprudencia grave.
Hace dos semanas la titular del Juzgado de Instrucción 9 de Málaga terminó la investigación del caso tras tomar declaración a los implicados y analizar diferentes pruebas, como el informe de la Guardia Civil o la autopsia del menor, y dio traslado a las partes para que emitieran sus escritos de calificación de los hechos. En el escrito de acusación, el fiscal pide la apertura de un juicio oral contra David Serrano por no “haber señalizado ni advertido” de la presencia de la prospección. El Ministerio Público insiste en que el acusado era el “único conocedor” de la existencia del pozo en el que cayó el pequeño ya que apenas “era visible”.
La Fiscalía acusa al dueño de la finca de un homicidio por imprudencia grave
Además de la pena de prisión, pide que Serrano indemnice a los padres de Julen por la muerte de su hijo y a la Junta de Andalucía en el valor de los daños y perjuicios causados que se determinen en la ejecución de la sentencia por el rescate del pequeño. La cifra ascendería a casi 700.000 euros.
El Ministerio Público relata que el 13 de enero de 2018 el acusado acudió en compañía de su pareja y su hija menor así como los padres de Julen y el pequeño a dicha parcela con la intención pasar el día. El pequeño correteaba seguido por su padre hasta que desapareció colándose por la boca del pozo.
El fiscal mantiene que los padres de Julen y la pareja del acusado “desconocían” que estaban a “diecisiete metros de distancia de un pozo sin tapar”.