Cuatro adolescentes están acusados de violar a un menor con Asperger

Los Mossos d’Esquadra investigan un presunto caso de agresión sexual a un chico de 13 años con síndrome de Asperger por parte de cuatro compañeros en la escuela Verge del Roser de Vallirana, un centro concertado de la fundación Dominicas, según avanzó ayer El Caso. Los padres presentaron una denuncia a los Mossos el 17 de diciembre, que pusieron el caso en conocimiento de la Fiscalia de Menores, según confirmaron a la ACN fuentes policiales. En la denuncia, que fue ampliada en enero de este año, los padres del niño también relataban que el menor había sido objeto de insultos y amenazas por parte de sus compañeros, hasta que finalmente el niño abandonó el centro el pasado febrero. Según el medio, cuatro jóvenes de tercero de la ESO, de entre 14 y 15 años de edad, le hicieron tocamientos y se masturbaron delante de él eyaculando en su boca. También habrían intentado penetrarlo analmente. La violación, que está siendo investigada, fue el final de una larga lista de insultos y agresiones en los que el joven, supuestamente, había entregado diferentes piezas de ropa y 300 euros a los cuatro agresores que lo habían estado extorsionando. Al no poder dar a los agresores lo que le demandaban se produjo la agresión sexual. El niño, que sufre un trastorno de Aperger, un derivado del autismo, seguía con cierta normalidad las clases de este centro concertado de Vallirana, pero el mes de diciembre de 2018 empezó a presentar signos que no eran normales en él, tenía miedo de los perros de casa, estaba muy nervioso e incluso sufría incontinencia urinaria. Sus padres vieron que todos estos síntomas de ansiedad evidenciaban que alguna cosa no iba bien y hablaron con él. Finalmente el menor explicó que un grupo de jóvenes del instituto, de entre 14 y 15 años y alumnos de tercero de ESO, lo acosaba. La serie de agresiones que relató pusieron en alerta los padres del niño, que denunciaron los hechos a la policía.

En un comunicado, el ayuntamiento de Vallirana asegura que ha trabajado de forma transversal con la familia, el centro y todos los agentes de la comunidad educativa, y ha rechazado cualquier tipo de violencia y agresión. Fuentes del centro afirmaron que cuando tuvieron conocimiento de los hechos iniciaron los protocolos estipulados y pusieron el caso en conocimiento de la Inspección.