Trump se abre a hablar con Irán y a llegar a acuerdos comerciales con China y la UE

La cumbre del G7 acabó ayer con un comunicado final breve y sin apenas novedades pero con un anfitrión, el presidente francés, Emmanuel Macron, que se ha apuntado un éxito al conseguir que su homólogo estadounidense, Donald Trump, esté dispuesto a hablar con Irán. Un Trump más dialogante de lo que tiene acostumbrado al mundo y que se abre también a llegar a acuerdos comerciales con China y con la Unión Europea.

Macron anunció en Biarritz, donde se han reunido las siete potencias económicas más importantes del planeta, gestiones para que, “en las próximas semanas”, pueda haber un encuentro entre el presidente de Irán, Hasán Rohani, y Donald Trump, si bien este último matizó que esta reunión solo tendrá lugar “si las condiciones son las correctas”. “Para nosotros hay dos cosas muy importantes: Irán no puede tener nunca armas nucleares y la situación no puede amenazar la estabilidad de la región”, subrayó Macron en una rueda de prensa junto a Trump, con quien se vio en el marco de la cumbre protagonizada por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, y donde la Unión Europea cuenta con representación política propia. Trump insistió en que él nunca habría firmado el acuerdo de 2015 -impulsado por su predecesor en la Casa Blanca, Barack Obama- y tiene “buenas sensaciones” sobre la posibilidad de lograr algún tipo de acuerdo con Irán. Para el presidente estadounidense, las líneas rojas pasan por garantizar que Irán no obtenga armamento atómico, que ponga fin a las pruebas de misiles balísticos y ampliar las obligaciones de un hipotético acuerdo “a un periodo más largo de tiempo”.

El dirigente republicano también mostró su buena disposición para llegar a un acuerdo comercial con China siempre que este sea “un buen acuerdo para Estados Unidos”, mientras que señaló lo difícil que resulta cerrar un trato con la UE, aunque también confía en llegar a algún acuerdo con los Veintiocho. “La UE es muy dura a la hora de llegar a un acuerdo, pregúntenle a Theresa May”, señaló Trump, que mostró su confianza en poder llegar a un acuerdo con el bloque europeo sin la necesidad de imponer aranceles a los automóviles europeos.

Uno de los focos del G7 había sido el Brexit y, al respecto, la Comisión Europea (CE) insistió ayer en que es “esencial” que el Reino Unido honre los compromisos financieros que hizo como Estado miembro a través de la “factura” del Brexit para empezar “con buen pie” la nueva relación, tras su salida del bloque comunitario.

Reformar la Organización Mundial del Comercio, entre los consensosLos jefes de Estado y de Gobierno reunidos este fin de semana en Biarritz, en el sur de Francia, publicaron un breve comunicado final pese a las tensiones previas a la cita que auguraban la ausencia de acuerdo. Sin embargo, el texto apenas contiene novedades. El ámbito comercial quizá es el que más destaca en el contexto de una guerra arancelaria entre China y Estados Unidos. El G7 defiende así una reforma de la Organización Mundial del Comercio “para que sea más eficaz en la protección de la propiedad intelectual, resolver disputas más rápidamente y erradicar prácticas comerciales desleales”.