Las bases de ERC avalan la línea de Junqueras y la leridana Vilalta, nueva secretaria adjunta

La militancia de ERC refrendó ayer el liderazgo que, desde hace ocho años, desempeñan Oriol Junqueras y Marta Rovira, y que ha llevado a la formación a convertirse en la principal fuerza independentista del Congreso de los Diputados, tras la crisis de los años 2010 y 2011. Todo ello, en un momento de cambio para el partido y de transformación del movimiento independentista. Con una participación de 5.192 personas, que equivale al 57,14% del censo, el 90,3% de los votantes suscribieron la lista única, la única que se presentó a estos comicios, y que está completada por Pere Aragonès, que se convertirá en el coordinador nacional de ERC, y por la leridana Marta Vilalta, que desde ahora ocupará la secretaria general adjunta. Ambos ejercerán el mando mientras Junqueras está en la cárcel y Rovira vive en Suiza. Además, la también leridana Sara Bailac fue elegida como vicesecretaria de Acción Política y Jordi Roig, gerente y secretario de Finanzas.

Aragonès aseguró que ahora “hay que empezar una nueva etapa de fortalecimiento” con el objetivo de ensanchar la base del independentismo. A este respecto, recordó que hace una década solamente el 15% de los catalanes querían la independencia. “Ahora somos el 48%”, aseguró, y confió en que esta cifra aumente a lo largo de los próximos años. “Y es que no queremos un país a pedazos, queremos una sociedad cohesionada”, añadió Aragonès, porque “el proyecto de la independencia tiene que contar con muchos más ciudadanos”.

Por su parte, Vilalta, en declaraciones a Nació Digital, admitió que “en este momento no existen las condiciones para que el proceso de independencia sea rápido”. En este sentido, remarcó que la mayoría de los actores del independentismo “han asumido” que el camino que queda por recorrer es largo. Asimismo, lamentó que la “represión” haya “roto la confianza” entre JxCat y ERC.

Al hilo de esto, en El Periódico, Rovira se fijó como prioridad la unidad del independentismo. Sin embargo indicó que “si no se consigue la unidad, que triunfe el mejor y que decida la ciudadanía”. “Hemos de acabar con los reproches mutuos”, concluyó.