REINO UNIDO TERRORISMO
El terror vuelve a Manchester
Al menos cinco personas fueron apuñaladas ayer cerca de un centro comercial en Manchester, en el norte de Inglaterra, en un incidente en el que la Policía detuvo a un hombre de unos 40 años por “terrorismo”.
Aunque en un primer momento la Policía apuntó a un posible caso de “asalto grave”, un alto mando policial, Russ Jackson, aclaró ante los medios que el sospechoso finalmente “ha sido arrestado bajo la sospecha de preparar e instigar un acto de terrorismo”.
Tras el suceso, el primer ministro británico, Boris Johnson, se declaró “impactado” por el “incidente” y ha trasladado su apoyo a los heridos y los afectados.
La Policía de Manchester señaló que sus agentes acudieron al lugar de los hechos después de que se alertara de un “incidente” en el Centro Comercial Arndale, en el centro de la ciudad. “Los oficiales que han acudido y las primeras indagaciones señalan que varias personas han sido apuñaladas”, indicó.
El diario local Manchester Evening News señaló que, como consecuencia del suceso, el centro comercial Arndale fue desalojado y se hizo eco de un vídeo difundido en redes sociales como Twitter en el que se ve a agentes de la Policía capturando a un individuo tras dispararle con una pistola eléctrica tipo Táser.
El ataque causó una gran inquietud en la ciudad, que fue blanco de un atentado terrorista el 22 de mayo de 2017. En esa ocasión, un terrorista suicida detonó una bomba en el pabellón Manchester Arena después de un concierto de la cantante estadounidense Ariana Grande, provocando la muerte de 22 personas, entre ellas varios niños.
La muerte de la niña se ha considerado parte del plan del grupo terrorista para exterminar a los miembros de la minoría yazidí, una religión preislámica, según aseguró un portavoz de la Fiscalía al justificar el cargo de genocidio.
Alemania acusa a un iraquí de genocidio por asesinar a una niña Un iraquí sospechoso de pertenecer a Estado Islámico, identificado como Taha A. J., ha sido acusado de genocidio en Alemania por encadenar y dejar de morir de sed al sol a una niña yadizí de cinco años, según informó la Fiscalía alemana.