Sánchez cierra la puerta a posibles indultos

El presidente del gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, ha apostado por abrir una “nueva etapa” basada en el “diálogo y la ley” después de una proceso judicial en el Tribunal Supremo que ha calificado de “ejemplar” y de una sentencia que llama a “acatar y cumplir”. En una comparecencia sin preguntas en español e inglés en La Moncloa, Sánchez también ha advertido que a su entender el acatamiento de la sentencia "significa su cumplimiento íntegro", cerrando la puerta de esta manera a posibles indultos. Ha advertido además que su gobierno “se mantendrá atento” y “garantizará la convivencia, la seguridad y el respeto a la legalidad democrática” con firmeza, proporcionalidad y desde la legalidad” sin excluir ninguna de las opciones de respuesta que contempla el ordenamiento vigente. Fuentes de La Moncloa han adelantado que el presidente español en funciones llamará esta tarde a los líderes del PP, Cs y Podemos, Pablo Casado, Albert Rivera y Pablo Iglesias.

El presidente español en funciones ha destacado que una vez emitida la sentencia hay que hacer efectivo su “íntegro cumplimiento”. Ha asegurado que España es una “democracia” y que como tal “nadie es juzgado por sus ideas o por defender un proyecto político”, sino “por delitos recogidos a nuestro ordenamiento jurídico”.

Ha aplaudido la tarea del Tribunal Supremo que “ha trabajado con intendencia, dando ejemplo de autonomía, transparencia, garantías y profesionalidad”. Según el presidente español la esta es una sentencia “ejemplar” que coincide también con “el naufragio de un proyecto político que deja detrás suyo un triste saldo de dolor y enfrentamiento”.

En este sentido ha acusado a los líderes independentistas de haber ignorado “los derechos de la mayoría social no independentista” y originado “una fractura a la convivencia de la sociedad catalana”. “El Estatuto fue atropellado y roto unilateralmente” y “la integridad territorial y el principio de soberanía fueron atacados”.

“Se abre una nueva etapa”

Según el presidente español, una vez dictada la sentencia “se abre una etapa nueva” que podría estar basada en la “concordia” donde su ejecutivo “siempre contribuirá a facilitar el encuentro de la sociedad catalana fracturada por el independentismo”. “Es la convivencia la que está en juego, y la Generalitat y el Parlament tienen que asumir a responsabilidad de representar a todos los catalanes y gobernar para todos y no para una minoría afín en las tesis independentistas”.

Estará “vigilando”

Con todo ha recordado que “en los próximos días” el gobierno de España sigue contando “con todas las atribuciones de la legalidad” y “se mantendrá atento y garantizará la convivencia, seguridad y respeto a la legalidad democrática”. “Lo haremos con firmeza democrática, proporcionalidad y desde la legalidad”, ha dicho, hecho que “implica respetar la legalidad sin excluir ninguna posibilidad que otorga el ordenamiento vigente”.