Nuevas protestas en Barcelona y Lleida por noveno día consecutivo

Las protestas para mostrar el rechazo a la sentencia del Supremo continuaron ayer en Catalunya por noveno día consecutivo. En Barcelona, unas 2.000 personas, según la Guardia Urbana, se concentraron por la tarde en la plaza España, donde se encuentra la comisaría central de los Mossos d’Esquadra, y derramaron botes de jabón en el interior de la fuente para hacer espuma, en una protesta convocada por los CDR. Bajo el lema ‘Limpiamos las calles de injusticia’, muchos de las botes eran de Fairy, que se hizo popular en el juicio por el procés a partir de la declaración del exdelegado del Gobierno Enric Millo, quien afirmó que el 1-O algunos manifestantes derramaron jabón en los colegios para hacer resbalar a la policía, en la artimaña conocida como “la trampa del Fairy”.

Por otra parte, medio centenar de personas, convocadas para la plataforma No en el nostre nom, se concentraron a las 19.30 horas ante la delegación de la Generalitat en Lleida para denunciar “el racismo institucional” que ha ordenado el internamiento de dos detenidos en los disturbios en un CIE (centro de extranjeros) para ser expulsados. “Una vez más se vulneran los derechos de las personas. ¡Ninguna persona es ilegal!”, dijeron. Se trata de dos de los 18 detenidos por los altercados del viernes en la capital del Segrià. A las 19.45 horas cortaron la avenida Catalunya y 20 minutos después iniciaron una marcha que pasó por Blondel y finalizó ante la sede del PSC. También hubo un acto de protesta ante los juzgados de Cervera, donde una decena de personas lanzaron basura ante el edificio.