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El pleno de Barcelona rechaza la sentencia del 1-O

Y pide la libertad de los condenados por el Supremo || Colau apoya el texto junto a ERC y JxCat, y el PSC vota en contra

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la edil Francina Vila, ayer.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y la edil Francina Vila, ayer.ACN

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El pleno de Barcelona aprobó ayer una proposición que rechaza la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes independentistas por el 1-O y aboga por su inmediata puesta en libertad. El documento, que salió adelante con los votos de Barcelona en Comú, ERC y JxCat, también exige que los políticos soberanistas en el exilio puedan retornar “libremente” a Catalunya. Así las cosas, considera que la vía penal no es la “adecuada” para resolver un conflicto de carácter político, y también defiende que el juicio se ha desarrollado sin las garantías exigibles en un Estado democrático. “Reconocemos que Catalunya tiene derecho a la autodeterminación”, añade el texto.

A diferencia de los ediles de Colau, los del PSC se desmarcaron del texto, del mismo modo que lo hicieron los de Barcelona pel Canvi, Cs y el Partido Popular.

Tanto el líder de los republicanos en el consistorio de la ciudad condal, Ernest Maragall, como la de JxCat, Elsa Artadi, explicaron que se trata de un “acuerdo de mínimos” compartido por el 80% de los catalanes. “Lo que ha sucedido estos días no es el final de nada, es el principio de todo. Pero tenemos un Estado ciego y sordo”, añadió Maragall, mientras que Artadi espetó a los socialistas que “lo que muchos decís en privado nos gustaría que lo dijerais en público”. Por su parte, Jordi Martí, edil de Barcelona en Comú, advirtió de que “mientras haya presos, no llegarán las soluciones”. Por el contrario, el líder de los socialistas en Barcelona, Jaume Collboni, arremetió contra los independentistas y sus socios de gobierno. En este sentido, achacó a la “frustración por las mentiras de buena parte del independentismo” las protestas contra la sentencia. Por su parte, Manuel Valls, de Barcelona pel Canvi, alertó que “no se puede ser nacionalista como lo sois porque crea un etnicismo muy peligroso”. “Ser independentista no es delito, pero cometer sedición y malversación sí que lo es”, sentenció Luz Guilarte de Ciudadanos. Por su parte, Josep Bou, concejal del Partido Popular, aseguró que los independentistas están “impotentes y rabiosos”.

En otro orden de cosas, Francina Vila tomó ayer posesión de su puesto como concejal en detrimento de Joaquim Forn, inhabilitado por el Tribunal Supremo por el 1-O.

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