REINO UNIDO POLÍTICA
Johnson descarta otro referéndum por la independencia en Escocia
La postura del primer ministro contrasta con la de los laboristas, que aceptarían una nueva consulta || Asume un acuerdo con Bruselas para salir de la UE
El primer ministro británico, Boris Johnson, rechazó ayer la posibilidad de convocar un nuevo referéndum sobre la independencia de Escocia como demandan los nacionalistas escoceses. “No creo que la gente de este país piense que los referéndums sean muy buenos para la armonía. Ya hubo uno en 2014”, afirmó Johnson en una entrevista en Sky News. Ante la repregunta sobre si él como primer ministro aceptaría un segundo referéndum, fue más tajante: “No, no lo haría. No quiero que haya uno”.
La postura de Johnson contrasta con la del principal partido de la oposición, el Partido Laborista, que aceptaría la celebración de una nueva consulta, aunque en la misma abogaría por que Escocia siguiera dentro de Reino Unido. La portavoz laborista de Empresas, Energía y Estrategia Industrial, Rebecca Long-Bailey, argumentó que si el gobierno escocés decide apoyar un segundo referéndum de independencia después de las próximas elecciones escocesas, previstas para 2021, un gobierno liderado por Jeremy Corbyn –secretario general laborista– no se opondría al mismo. Estas declaraciones de tories y laboristas fueron la respuesta de los partidos mayoritarios de Westminster al multitudinario acto independentista celebrado el sábado en Glasgow, que reunió a unas 20.000 personas y que estuvo liderado por la ministra principal escocesa, la nacionalista Nicola Sturgeon.
Por otro lado, en la misma entrevista de Sky News, Boris Johnson declaró que la única forma de abandonar la Unión Europea pasa por el acuerdo que ha negociado con las autoridades de Bruselas. “La única manera de cumplir el Brexit consiste en seguir adelante con el acuerdo que tenemos”, aseguró Johnson en una comparecencia que supuso el pistoletazo de salida de su carrera hacia las elecciones del 12 de diciembre. En la entrevista, Johnson lamentó “profundamente” no haber cumplido con su compromiso del Brexit el 31 de octubre y relacionó este cambio de rumbo político con la incapacidad para llegar a un acuerdo económico especial con Estados Unidos que hubiera supuesto una tabla de salvación ante lo que habría sido una tumultuosa salida del bloque europeo sin acuerdo previo.