PANORAMA
Torrent denuncia la “radicalidad” del Estado contra el Parlament
Defiende que no convertirá la Cámara catalana en un “órgano censor” || El pleno rechaza que Torra comparezca para explicar su vinculación con los CDR
El presidente del Parlament, Roger Torrent, conversando ayer con otros miembros de la Mesa.
Un días después de la tormenta política que se vivió en el Parlament, a raíz de la moción sobre la autodeterminación impulsada por la CUP y su suspensión por parte de Tribunal Constitucional, el presidente de la Cámara catalana, Roger Torrent, criticó ayer tras la sesión de control del Govern, que desde el Ejecutivo central se hable de la creación de un Gobierno progresista mientras el Estado “radical persigue los debates parlamentarios”.
El presidente insistió en que él no permitirá “nunca que la censura entre en el Parlament” y que “está actuando con absoluta normalidad democrática permitiendo debates sobre cualquier cuestión”. Torrent también defendió que el Parlament decidiera no publicar el resultado de la moción en el Boletín Oficial del Parlament reiterando que él asumirá “todas las responsabilidades políticas que tome la Mesa”, pero asegurando que hay que evitar que esto pueda afectar a “los funcionarios”.
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En esta misma línea se mostró el vicepresidente primero del Parlament, Josep Costa, que reivindicó que la Mesa es la única responsable de las tramitaciones Parlamentarias, aunque pidió un “esfuerzo” para un “acuerdo nacional” que defienda la libertad de expresión en las instituciones catalanas.
Durante la sesión de control del Govern también rechazó las cuatro peticiones presentadas por Cs, PSC, el comuns y el PPC que reclamaban la comparecencia del president Quim Torra en el pleno para explicar si tenía vinculaciones con los siete CDR detenidos el mes pasado.
El Supremo, contra la inmunidad de Puigdemont El Tribunal Supremo rechazó ayer el recurso de apelación presentado por Carles Puigdemont y Toni Comín contra una interlocutoria del juez Pablo Llanera en que rechazaba su petición de dejar sin efecto las euroórdenes contra ellos al ser diputados electos en la Eurocámara. El Supremo sostiene que como ni Puigdemont ni Comín adquirieron la condición de eurodiputados, puesto que no acataron la Constitución ni asistieron a la toma de posición, por lo que no tienen inmunidad. El alto Tribunal, contrario a la opinión del Abogado General del Tribunal de Justicia europeo, considera que no es suficiente con salir elegido en los comicios para adquirir la condición de parlamentario y por tanto la inmunidad que otorga el cargo.
