POLÍTICA ACUERDOS DE GOBIERNO
PSOE y ERC pactan los equipos negociadores para desbloquear la investidura de Sánchez
Los socialistas confían que los republicanos se abran a modificar su “no” inicial y abordar la situación en Catalunya “desde la ley y el diálogo” || Los independentistas quieren una negociación “entre iguales”
PSOE y ERC cerraron ayer los miembros de los equipos negociadores encargados de la negociación para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Según explicó la portavoz del PSOE en el Congreso y número dos del partido, Adriana Lastra, y el diputado electo de ERC, Gabriel Rufián, representantes de ambos partidos mantuvieron una reunión el jueves en la Cámara Baja en la que se emplazaron a abordar la negociación la semana que viene. En esas conversaciones se dio forma a los equipos negociadores y según avanzó ayer Nació Digital y confirmaron las mismas fuentes conocedoras, por parte de los socialistas están la propia Lastra, el secretario de organización del PSC, Salvador Illa, y el tercer miembro será o el secretario del organización del PSOE y ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, o la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo.
Por parte de los republicanos, el equipo estará formado por Rufián, la portavoz y secretaria general adjunta de ERC, la leridana Marta Vilalta, y el presidente del Consell Nacional del partido, Josep Maria Jové, que fue el número 2 de Oriol Junqueras en Economía.
El lunes los republicanos consultarán a las bases si avalan o no la investidura sin un acuerdo previo
Si Iglesias asume Trabajo, la Seguridad Social o las pensiones podrían ir a otro ministerio
ERC ya manifestó que su posición inicial es el ‘no’ a la investidura, aunque se abren a modificar su postura si hay un acuerdo para impulsar una mesa de negociación para abordar el conflicto en Catalunya que sea entre iguales, sin condiciones para que se pueda hablar de cualquier tema, fijando un calendario y unas garantías para cumplir los acuerdos que se tomen. El lunes, los republicanos consultarán a sus bases sobre si avalan o no la investidura de Sánchez sin un acuerdo previo para crear esta mesa de negociación. Por su parte, el PSOE confía en que los republicanos se abran modificar su ‘no’ tras la consulta de ERC, aunque la cúpula del PSOE insiste en la premisa de abordar el conflicto con Catalunya desde la “ley y el diálogo”, por este orden.
En este sentido, la portavoz del Ejecutivo en funciones, Isabel Celaá, insistió ayer después del Consejo de Ministros en apelar a la responsabilidad de todas las fuerzas políticas para facilitar la formación de Gobierno “cuanto antes” porque el país “lo necesita”. Por otro lado, desde ayer están llamados a votar un total de 178.600 militantes socialistas para avalar el preacuerdo para gobernar en coalición con Unidas Podemos en una consulta que se desarrolla desde ayer hasta hoy a las 20.00 horas.
Trabajo, Igualdad y Universidades irían a Podemos En el esquema del Gobierno de coalición –claves de la negociación del futuro Ejecutivo de Pedro Sánchez, en el que Pablo Iglesias tendrá una vicepresidencia social– Trabajo, Igualdad y Universidades son algunos ministerios que es posible que caigan en manos de Podemos, pero también es evidente que entre los puntos más complicados de la negociación, que se lleva a cabo con absoluta discreción, estarán las competencias que Sánchez esté dispuesto a ceder. La formación morada no reclama ministerios de Estado, y se da por seguro que la socialista Nadia Calviño, al frente de una vicepresidencia económica, será uno de los puntales del próximo Gobierno de Sánchez y tendrá la llave de gran parte de los asuntos que lleguen al Consejo de Ministros, mientras que Carmen Calvo dirigiría otra vicepresidencia más política. Eso haría difícil que Iglesias tuviera capacidad de intervenir en los temas fundamentales de la política económica, con lo que ha cobrado fuerza la posibilidad de que, si Podemos asume el ministerio de Trabajo (para la diputada gallega Yolanda Díaz), se descuelguen de ese departamento algunas de las atribuciones con las que cuenta ahora, como las competencias en Seguridad Social o pensiones, que en una nueva estructura podrían depender de otro ministerio.