Oriol Junqueras pide su puesta en libertad y la nulidad de la sentencia

La defensa de Oriol Junqueras, el abogado Andreu Van den Eynde, ha pedido al Tribunal Supremo la liberación “inmediata” del líder de ERC y que decrete la nulidad de la sentencia por el 1-O, que lo condena a 13 años de prisión. Defiende, en la línea de lo dictado por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que adquirió la inmunidad tras resultar elegido eurodiputado.

En el escrito de alegaciones tras la sentencia del TJUE, el letrado exige al Alto Tribunal que garantice el “libre desplazamiento” de su cliente al Parlamento Europeo para que este pueda ejercer sus derechos y acreditarse como eurodiputado, algo que ya hicieron Carles Puigdemont y Toni Comín. Además también señala en su escrito que, en caso de discrepancia, el derecho de la Unión prima “frente a las normas jurídicas de origen interno”. Por ello, reclama que se anule toda la causa desde el pasado 13 de junio, fecha en que la Junta Electoral Central proclamó los resultados de los comicios europeos, incluida de la sentencia del 1-O dictada el pasado 14 de octubre. Van den Eynde pidió al tribunal la tramitación de sus alegaciones por la vía urgente para que este pueda pronunciarse en “la mayor brevedad posible”.

Torra visitó ayer a los líderes independentistas presos en Lledoners en su “injusta” tercera Navidad encerrados

El pasado jueves el Supremo dio cinco días a las partes implicadas para que presentaran sus alegaciones. Con el escrito de la defensa presentado, solo queda pendiente el informe de la Abogacía del Estado. La acusación particular, ejercida por Vox, exigió su inhabilitación y Fiscalía acuso al exvicepresidente de “abuso de derecho” por pedir la nulidad de la sentencia.

Por otro lado, la Junta Electora Provincial de Barcelona desestimó las peticiones presentadas por PP, Cs y Vox para que se le retirara al president de la Generalitat, Quim Torra, su credencial como diputado del Parlament de manera inmediata después de que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya lo condenara a 18 meses de inhabilitación para ejercer cargos público por negarse a retirar los lazos amarillos, una sentencia que no es firme ya que cabe recurso contra ella. Precisamente que el fallo pueda recurrirse es el argumento que da la Junta Electora en su resolución, que recuerda que no se dan los supuestos para proceder a retirarle su credencial como diputado hasta que la causa judicial no haya concluido.

Por su parte, Torra visitó ayer a los a los exconsellers y líderes sociales encarcelados en Lledoners y a la expresidenta de la Mesa del Parlament, Carme Forcadell, encerrada en la prisión de Mas d’Enric. A la salida pidió su libertad y denunció que estos pasarán “de manera injusta” su tercera Navidad encerrados en prisión.

BARCELONA

A pocos días de acabar el año y con una investidura que ya se prevé para principios del 2020, la secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, aseguró ayer que su formación está a la expectativa del informe que emita la Abogacía del Estado de la sentencia del Tribunal de Justicia europeo sobre la inmunidad de Junqueras para volver a la mesa de negociación con el PSOE y acabar de perfilar “las últimas correcciones” para dar credibilidad al diálogo que ofrecen los socialistas y facilitar la investidura de Pedro Sánchez. Vilalta aseguró que las negociaciones, que hasta la semana pasada fueron avanzando en torno al reconocimiento de que hay un conflicto político en Catalunya que se debe resolver, deben acabar “de concretarse”.

En este sentido, el presidente de JxCat en el Parlament, Albert Batet, recalcó que la liberación de Junqueras “no puede ser una condición de investidura” porque, en su opinión, es una obligación del presidente del Gobierno en funciones, tras la sentencia dictada por el TJUE. Los socialistas, por su parte, barajan ahora que el debate de investidura pueda llevarse a cabo entre el 4 y el 7 de enero.

Mientras, desde Cs apelaron a los barones y a otros sectores socialistas a moverse para frenar un posible acuerdo con ERC para la investidura de Pedro Sánchez, ante el “chantaje” que para ellos plantea ERC.