PANORAMA
Puigdemont exige a Llarena que anule su euroorden y asegura que no es “imparcial”
Reclama que se le permita tener libertad de movimientos tras acreditarse como eurodiputado || Afirma que la orden de detención fue dictada “sin fundamentos y sin permiso del Parlamento Europeo”
El abogado de Carles Puigdemont reclamó ayer al instructor de la causa del procés en el Tribunal Supremo, Pablo Llarena, que desactive las euroórdenes de detención que pesan contra él y archive su causa. Además también pidió al magistrado que se aparte de la causa “por carecer de la más mínima apariencia de imparcialidad”.
La defensa de Puigdemont, ejercida por Gonzalo Boye, presentó un escrito de 63 páginas en el que sostiene, a raíz de la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TSJUE) sobre la inmunidad del líder de ERC Oriol Junqueras, que su cliente está protegido por la inmunidad parlamentaria y que “no es procedente ninguna medida privativa de su libertad”.
Pide a la Sala de los Penal la rectificación de la libertad para uno de ellos por un fallo en el auto
Boye también afirma en el escrito que la orden europea de detención fue dictada sin fundamentos legales y sin la previa autorización del Parlamento Europeo. Asimismo, reclama dejar sin efecto “cualquier otra medida cautelar que subsistan contra Puigdemont en este procedimiento, aun acordadas con anterioridad a la adquisición de su condición de diputado al Parlamento Europeo, por resultar incompatibles con las inmunidades inherentes a esa condición” y recuerda que “ni las autoridades de Bélgica, ni las de Alemania, ni las de Escocia” en los tres procesos euroórdenes de detención a los que se han visto incursos Puigdemont, han entendido necesario ingresarle en prisión preventiva.
Se trata de la misma postura que la semana pasada reconoció el TJUE en el caso de Junqueras, por lo que según Boye la posición adoptada por la Fiscalía del Supremo como por el juez instructor del caso es “insostenible”. Además pone en duda la imparcialidad de Llarena por el hecho de que mantenga un contencioso civil con Puigdemont que aún está pendiente de resolverse
Llanera pidió informes a las partes para saber cómo aplicar el fallo de Luxemburgo sobre la inmunidad de Junqueras que podría afectar a los procesados que se encuentran fuera y que fueron escogidos como eurodiputados, como son el caso de Puigdemont y Toni Comín.
MADRID
La Audiencia Nacional acordó ayer dejar en libertad bao fianza a Ferran Jolis y Alexis Codinas, dos de los CDR detenidos el pasada 23 de septiembre en la ‘operación judas’ y que están siendo investigados por terrorismo. Jolis, que tiene vínculos familiares en la localidad leridana de Belianes, puede salir con una fianza de 5.000 euros y, según la resolución judicial, se ha valorado que “no tuvo contactos con materiales explosivos”. Por su parte, a Codinas le impusieron una fianza de 10.000 euros ya que, aunque no se encontraron explosivos en su domicilio, sí se hallaron “sustancia precursoras”. Inicialmente la Fiscalía se opuso a su liberación al considerar que podría tener en su casa “ un laboratorio clandestino” para fabricar explosivos. Codinas forma parte, junto a los únicos dos detenidos que permanecen en prisión preventiva, Germinal Tomàs y Jordi Ros, del “núcleo productor” de explosivos del grupo, según la investigación. Otros tres de los siete detenidos en la operación, Xavier Duch, Eduard Garzón y Txevi Buïgas, salieron de prisión la semana pasada después de depositar una fianza de 5.000 euros.
La Audiencia ha impuesto a Jolis y Codinas medidas cautelares como comparecer en los juzgados semanalmente, la prohibición de abandonar el Estado, la retirada del pasaporte y la notificación de un domicilio en el que se les pueda localizar. No obstante, desde Alerta Solidaria informaron que ambos deberían permanecer un días más en prisión por un error en la gestión de las fianzas.
Por su parte, la Fiscalía de la Audiencia solicitó a la Sala de lo Penal que emitiera una rectificación del auto que acuerda la puesta en libertad para Codinas, ya que “le atribuye en su auto un apoyo a la libertad condicional que, en realidad, no se produjo”.