SUCESOS CRIMEN
La asesina confesa de su hija de 10 años padece problemas mentales
Aunque la jueza la envía a prisión y descarta internarla en un psiquiátrico || Insiste en que drogó a la pequeña con 80 pastillas, la metió en la bañera y la ahogó
La titular del juzgado de instrucción número 1 de Girona dictó ayer prisión provisional, comunicada y sin fianza para la mujer que el lunes acabó, presuntamente, con la vida de su hija de 10 años en su domicilio familiar de la capital del Gironès, situado en el número 28 de la Rambla Ferran Puig. Durante su comparecencia, la investigada, a la que se le atribuye un delito de asesinato, ratificó la primera declaración que efectuó ante los Mossos d’Esquadra y en la reconstrucción de los hechos, que se llevó a cabo horas después del crimen. Así, explicó que recogió a la pequeña cuando terminó su clase de mecanografía y se fueron a casa. Una vez en el inmueble, hizo que tomara disueltas en agua 80 comprimidos de un ansiolítico y le dijo que era una cura para el dolor de anginas. Tras ingerir el medicamento, la niña entró en “estado de somnolencia”. Fue entonces cuando su progenitora llenó la bañera y puso dentro a la pequeña, que murió ahogada.
En su auto, la jueza justifica la prisión preventiva ante el riesgo de fuga y para evitar la reiteración delictiva. Y es que la mujer padece problemas psiquiátricos, ha estado ingresada varias veces en centros hospitalarios y mostró una “absoluta frialdad emocional” durante la declaración. En este sentido, según avanzó ayer La Vanguardia, fue dada de alta de un psiquiátrico hace dos semanas. De hecho, la presunta autora del crimen ha sido diagnosticada de un transtorno de conducta grave y estaba a punto de ser incapacitada legalmente por su propia familia. La hermana de la acusada y su hija se hacían cargo de la pequeña de 10 años, y esta última se iba a convertir en su tutora legal. “Mi hermana es una persona con una enfermedad mental. Pido el máximo respeto”, dijo en los juzgados de Girona a los periodistas que se congregaron para seguir la declaración. Aun con todo, el fiscal del caso, Enrique Barata, sostuvo que “no está para internamiento psiquiátrico”. “Con lo que hay en autos no está para internamiento psiquiátrico, puesto que la médico forense ya dijo que está consciente, orientada, coherente”, manifestó. A este respecto, la defensa había solicitado que no fuera enviada a la cárcel y que dictara su ingreso en una institución mental.