ECONOMÍA CUMBRE INTERNACIONAL
Davos asiste al cruce de reproches entre Trump y Thunberg por el clima
La activista acusa a los líderes de haberse rendido ante el calentamiento global y el presidente de EEUU ve catastrofismo || España declara la emergencia climática
Donald Trump acudió ayer al foro de Davos junto a su hija Ivanka.
El Foro Económico Mundial de Davos fue ayer el escenario de un nuevo cruce de reproches entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y la joven activista sueca Greta Thunberg a cuenta de la crisis climática. Mientras que Trump presumía de su posición negacionista sobre el calentamiento de la Tierra y arremetió contra los “profetas de la fatalidad”, Thunberg endureció su mensaje y criticó a los líderes políticos y económicos su “inacción” en la lucha por la supervivencia del planeta.
Trump arremetió contra los “pesimistas” sobre el clima y pidió a los asistentes a Davos que rechacen a los “profetas de la fatalidad”, en un claro mensaje a Thunberg y a quienes como ella alertan de esta emergencia.
En su opinión, quienes promulgan ese mensaje son los “alarmistas” que siempre buscan “lo mismo”, tener el “poder absoluto” y controlar “cada aspecto” de la vida de los demás.
Desde España, el Consejo de Ministros aprobó un acuerdo por el que se aprueba la Declaración de Emergencia Climática y Ambiental de España, con la que el Gobierno se compromete a adoptar 30 líneas de acción prioritarias y cinco de ellas en los primeros cien días de Gobierno, para luchar contra el cambio climático.
En cuanto a los cinco primeros compromisos transversales que el Gobierno pondrá en marcha en los próximos cien días, la ministra portavoz, María Jesús Montero, anunció que se remitirá la Ley de Cambio Climático al Parlamento que plantea un sistema 100% renovable en 2050, con vehículos cero emisiones de CO2 en esa fecha, así como un sistema agrario neutro de CO2 también a mitad de siglo, o un plan de descarbonización a largo plazo, entre otras medidas.
Paralelamente, Trump y su homólogo francés, Emmanuel Macron, acordaron relajar las tensiones comerciales entre ambos países y seguir dialogando sobre las posibilidades de alcanzar un acuerdo respecto del impuesto que grave las actividades de las grandes empresas tecnológicas, la conocida como “tasa Google” con el fin de evitar una escalada en la guerra comerciales.
