Junqueras dice que se “muere por dialogar” y “volveremos a ejercer la autodeterminación”

Tras el intenso pleno del lunes en el hemiciclo de La Ciutadella, el Parlament volvió a ser ayer el epicentro político con la comparecencia en la comisión del 155 de los consellers del Govern de Carles Puigdemont encarcelados por el 1-O. Primero Dolors Bassa y después Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn y Josep Rull entraron en un edificio en el que, algunos de ellos, no habían vuelto a estar desde la tarde de la declaración unilateral de independencia, el 27 de octubre de 2017. Con gritos de “libertad” les despidieron en aquella jornada los cargos que se agolpaban en la escalinata de la Cámara y con la misma consigna fueron recibidos ayer en las puertas del Parlament por una comitiva encabezada por el jefe del Executiu, Quim Torra, y el del legislativo, Roger Torrent.

El primero en comparecer fue Junqueras, que insistió en la vía del diálogo. “Me muero de ganas de negociar, tenemos que dialogar también con los que han aplaudido de forma entusiasta nuestro encierro”, sostuvo. Asimismo, puso el foco en que los principales instigadores del 155 “ya no están”. “Yo sí”, sentenció, y afirmó que “en la cárcel encontramos a gente más honrada que los poderosos que nos condenan”. Con todo, advirtió de que “volveremos a ejercer la autodeterminación”. Los diputados de Cs, sin embargo, no escucharon estas palabras porque, tras interrogar a Junqueras, se marcharon sin escuchar su réplica. “¿No os esperáis a escucharme? Ahora que habíamos empezado a dialogar”, les reprochó. Por su parte, Turull defendió que no “engañaron” a nadie porque “estábamos preparados para ser un Estado”. “Es como si prometo que voy a subir al Cadí y después no puedo hacerlo porque una tormenta me lo impide”, dijo Turull, que tiene una casa en la localidad leridana de Josa de Cadí. Además, cargó contra Cs, a los que acusó de ser “maleducados”. También censuró el “episodio de desunión” del lunes entre JxCat y ERC por la inhabilitación de Torra. “Si nos queréis felices en prisión, no nos convienen episodios como el de ayer (por el lunes)”, advirtió. Mientras, Romeva también apostó por el diálogo y denunció que el 155 fue una “señal de cobardía” del Estado. “El 155 ha sido el mayor error que se ha podido hacer en política en democracia”, aseguró. Romeva admitió que el independentismo “no ganó” en octubre de 2017, pero que tampoco lo hizo el Estado. “Hay un empate técnico”, precisó. Ya por la tarde, Joaquim Forn instó a los partidos independentistas a dejar el “tacticismo” y construir una “unidad de acción” porque el lunes fue un “día triste”. Además, denunció el “ataque encarnizado” del 155 a los Mossos y criticó la ausencia en la comisión de Cs, PP y PSC porque “no son capaces de aguantar un debate”. Rull, por su parte, reveló que siguió haciendo de conseller pese al 155, participó en reuniones y dio el visto bueno a proyectos. También acusó al Estado de ser “débil” por no saber canalizar “democráticamente” el anhelo independentista y apostó por un diálogo “consistente”. Por último, Bassa afirmó que el 155 no “descabezó” al independentismo y que Madrid trató de “hundir los pilares” de Catalunya con él.

Los presos fueron recibidos en el Parlament por Torra y Torrent al grito de “libertad” antes de su comparecencia

Entretanto, Jéssica Albiach, de los comunes, aplaudió la apuesta “nítida” por el diálogo de los presos, aunque lamentó su falta de “autocrítica”. Igualmente, exigió su puesta en libertad porque “no puede haber diálogo real mientras estén en la cárcel”. Por su parte, el diputado de la CUP Carles Riera apostó por “cambiar de estrategia” y “pasar al ataque”. Asimismo, lamentó que el 155 se encuentre “internalizado en los partidos y en las estructuras de la autonomía”.

PSC y PP afirman que la comisión es “propaganda” Los diputados del PSC y del PP no participaron ayer tampoco en la comisión del 155, como vienen haciendo desde el inicio de sus sesiones, pese a la presencia de los miembros del Govern de Carles Puigdemont encarcelados por el 1-O. A este respecto, en un comunicado, el PSC explicó que no acude a la comisión porque es un “espacio de propaganda independentista” y defendió que la aplicación del 155 fue “imprescindible” para restablecer el orden constitucional en Catalunya tras la declaración unilateral de independencia. En sintonía con los de Miquel Iceta, el presidente de los populares catalanes, Alejandro Fernández, manifestó que sus diputados no participan en la comisión para no “caer en la trampa” del independentismo. Así, sostuvo que el objetivo de JxCat, ERC y la CUP citando a los presos en la comisión es “blanquearles” y “ocultar” la división.