PANORAMA
Sánchez rectifica y mantiene la mesa de diálogo con el Govern pese a las elecciones
Horas antes anunció su congelación, pero dio marcha atrás tras reunirse con Gabriel Rufián || El anuncio inicial provocó la indignación de ERC, que acusó al PSOE de incumplir el acuerdo de investidura
La mesa de diálogo entre el Ejecutivo central y la Generalitat para acabar con el “conflicto catalán” centró ayer las noticias políticas después de que Moncloa anunciara su intención de paralizarla hasta que se celebraran elecciones en Catalunya. Esta decisión fue rectificada horas más tarde después de que el presidente, Pedro Sánchez, se reuniera con el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián.
La mañana de ayer la Moncloa informó en un comunicado que Sánchez mantendrá la reunión con el president de la Generalitat, Quim Torra, prevista para el próximo jueves en Barcelona, pero que esta sólo trataría “problemas urgentes”, como los estragos de la borrasca Gloria, y aplazando la mesa de diálogo sobre el “conflicto catalán” pactada con ERC a después de que se constituya un nuevo Govern cuando “el pueblo catalán haya hablado”. No obstante, siete horas más tarde y tras una reunión con Rufián, el Gobierno dio marcha atrás y aseguró estar dispuesto a construir la mesa de diálogo con el Govern “antes de los comicios” y expresó su sorpresa sobre que se hubiera puesto “en duda” su “voluntad de dialogar” y su “compromiso de cumplir con los acuerdos pactados” con ERC. Aun así matizó que considera que dado el horizonte electoral decidido por Quim Torra, “no se dan las mejores circunstancias para iniciar el diálogo entre gobiernos”.
Asegura que durante la reunión con Sánchez pondrá sobre la mesa la autodeterminación
La decisión inicial de aplazar el diálogo causó un gran malestar entre las filas de ERC, que advirtieron que posponer su constitución y funcionamiento supone un “incumplimiento flagrante” del acuerdo de investidura que alcanzaron con los socialistas y reclamaron que se pusiera una fecha “inminente” para su celebración. En dicho acuerdo se prevé que la mesa negociadora se constituya 15 días después de la formación del nuevo Gobierno, y en este sentido, el líder de los republicanos en el Parlament, Sergi Sabrià, señaló que “no podemos perder el tiempo” y más cuando “quedan muchos meses para la celebración de elecciones y es urgente abrir la vía política”.
Por su parte, el president Torra insistió en que su encuentro con Sánchez en Barcelona será para hablar del conflicto político en Catalunya y aseveró que él pondrá sobre la mesa el derecho a la autodeterminación, ya que es algo que consensuó en una reunión el pasado 15 de enero con los partidos y entidades independentistas.“Estamos convencidos de que el presidente Sánchez no cerrará ninguna puerta al diálogo en este encuentro ni excluirá ningún contenido”, explicaron fuentes del Govern.
Este giro de los acontecimiento provocó las críticas de los partidos de la oposición, que acusaron a Sánchez de ceder “una vez más” ante las “presiones de los independentistas”. Ante esta acusación, los socialistas aseguraron que el cambio de su postura viniera motivado por presiones de ERC.
Por otro lado, decenas de personas realizaron ayer una cadena humana en Lleida en apoyo a los presos del procés (imagen).