BREXIT NEGOCIACIONES
Johnson pide un pacto comercial sin tener que seguir las reglas de la UE
Bruselas propone un acuerdo sin aranceles si se compromete a cumplir con los estándares comunitarios || Gibraltar seguirá teniendo derecho a vetar el tratado
El primer día hábil tras la ruptura del Reino Unido con la Unión Europea ambas partes pusieron ayer sobre la mesa sus intenciones respecto a la negociación sobre el futuro acuerdo comercial, un tratado al que deberán llegar antes del 31 de diciembre de este año para evitar un Brexit duro. Bruselas ofreció a Londres un pacto que no contemple la imposición de aranceles ni cuotas a los bienes que entren en el mercado único, siempre que Londres se comprometa con las reglas de la UE. Sin embargo para el Reino Unido este acuerdo debe asemejarse a los que la comunidad mantiene con Canadá o Australia, es decir, permitiendo el comercio pero sin tener que seguir las normas comunitarias.
El negociador de la UE, Michel Barnier, explicó tras hacer pública la propuesta comunitaria que, además de evitar aranceles y cuotas, esta también incluye los servicios, el comercio digital, la propiedad intelectual, el acceso al mercado de los contratos públicos de ambas partes, la movilidad de las personas, el transporte o la posible participación del Reino Unido en programas de investigación o de educación comunitarios, como el Erasmus. Y, aunque dio por hecho que la batalla por el futuro acuerdo no será fácil señaló que Londres y Bruselas deberán establecer mecanismos consensuados para atenerse a los altos estándares europeos sociales, medioambientales, de clima, de fiscalidad o ayudas de Estado. Sin embargo para el primer ministro británico, Boris Johnson, un acuerdo comercial no tiene por qué aceptar la “normas de la UE en competencias de protección social o medioambiental” y aseguró que apuesta por “un ambicioso tratado de libre comercio, que abre mercados y evita toda la panoplia de regulaciones comunitarias”.
El plan de Johnson es iniciar conversaciones comerciales con otros países como Japón o EEUU al mismo tiempo que negocia con los veintisiete su futura relación.
En lo referente a Gibraltar, España seguirá teniendo derecho a veto. “Ningún acuerdo entre la Unión y Reino Unido negociado en base a estas directivas de negociación incluirá Gibraltar”, expone el borrador del texto legal presentado por Barnier.