Afirma que su marido la acuchilló antes de suicidarse en Valladolid

Un hombre de 48 años agredió presuntamente con una arma blanca a su pareja, de 39, que resultó herida leve, antes de fallecer tras autolesionarse con la misma arma la madrugada de ayer en un domicilio del barrio de Parquesol, en Vallalodid, según afirmó la mujer a la Policía. En el momento de los hechos los dos hijos mellizos de la pareja, de 3 años de edad, se encontraban durmiendo en una de las habitaciones de la vivienda.

El suceso se produjo alrededor d las 3 y media de la madrugada, cuando una llamada al 016, el teléfono habilitado para las mujeres maltratadas, alertó al servició de emergencia que se había producido una agresión en una vivienda donde una mujer había resultado herida y un hombre se encontraba inconsciente tras autolesionarse.

Cuando los servicio de emergencia llegaron al lugar de los hechos encontraron a la mujer en la entrada en estado de gran agitación y fue atendida por los servicios sanitarios al presentar lesiones. En el sofá encontraron el cuerpo del hombre con una arma blanca clavada en el pecho y por el que no pudieron hacer nada para salvarle la vida. Mientras, en una tercera estancia, dormían los dos hijos menores de la pareja. La mujer del fallecido fue trasladada a un centro hospitalario en el que fue atendida por diversos cortes y dada de alta el mismo día y los dos pequeños fueron entregados a un familiar para su custodia.

Pese a que esta fue la versión que la mujer ofreció a las autoridades, la Policía confirmó que mantienen abiertas todas las hipótesis. “Ahora hay que esperar a los resultados de la autopsia y a la declaración que preste la mujer”, manifestó el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Emilio Álvarez, quien concretó que no consta registro ninguna denuncia por violencia de género.

Por otro lado, la Guardia Civil localizó los cadáveres de una pareja de ancianos, de 84 y 91 años, en su domicilio situado en la localidad sevillana de Lora del Río. Un médico fue el que dio la voz de alarma después de que no asistieran a una consulta médica que tenían programada. Según la Policía, el cuerpo de los ancianos no presentaban signos de violencia y ni existían denuncias por malos tratos.