El Govern indigna a Madrid al colocar en la mesa de diálogo a dirigentes de JxCat y ERC

Incógnita desvelada. Cuando faltan pocas horas para que se celebre la primera reunión de la mesa de diálogo entre el Govern y el Ejecutivo central, la Generalitat hizo pública la composición de la delegación catalana que acudirá al encuentro. Así, junto al president, Quim Torra, y el vicepresident, Pere Aragonès, estarán presentes el conseller de Políticas Digitales, Jordi Puigneró, y el de Acción Exterior, Alfred Bosch. También asistirán la líder de JxCat en el ayuntamiento de Barcelona, Elsa Artadi, Josep Rius, exjefe de Gabinete de Torra y Carles Puigdemont, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, y el diputado republicano Josep Maria Jové. De esta manera, la comitiva de la Generalitat estará integrada tanto por miembros del Govern como por altos cargos de JxCat y ERC, a diferencia de la delegación de socialistas y Unidas Podemos. Y es que, junto al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, habrá vicepresidentes y ministros, y ningún dirigente de partido. A los nombres de Pablo Iglesias, Carmen Calvo, Carolina Darias, Salvador Illa y Manuel Castells ya desvelados la semana pasada, tras el anuncio de la parte catalana Sánchez añadió al ministro de Transportes, José Luís Ábalos, y a la ministra de Hacienda, Maria Jesús Montero. Así, habrá ocho negociadores a cada lado de la mesa.

Entretanto, la composición de la delegación catalana suscitó la desaprobación de la portavoz del PSC en el Parlament, Eva Granados, que se mostró “decepcionada” con los nombres anunciados por la presidencia de la Generalitat. En este sentido, aseguró que el Ejecutivo central parece que “se lo toma más en serio”. En la misma línea, Susanna Segovia, diputada de los comunes en la Cámara catalana, instó a JxCat y ERC a que no lleven posiciones partidistas a la mesa de diálogo. “Dejen de lado los intereses electorales, dejen al margen la campaña”, pidió Segovia.

El Govern subraya que en la parte catalana del diálogo tendrían que poder estar los “presos y exiliados”

Por su parte, la vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, defendió que la mesa de diálogo entre gobiernos esté formada únicamente por miembros de los ejecutivos catalán y español. “Es lo correcto”, sentenció. Y es que, a parte de la entrada de altos cargos de JxCat y ERC, la Generalitat denunció que no se puedan sentar en la negociación “los presos y los exiliados”.

Por el contrario, el portavoz de JxCat en el Parlament, Eduard Pujol, animó al Gobierno central a aceptar los nombres de la delegación catalana. También Vilalta, desde las filas de ERC, reivindicó la “legitimidad” de los nombres propuestos por la Generalitat.