Erdogan redobla el pulso a Bruselas y empuja a 76.000 migrantes a la UE

El Gobierno turco mantiene el pulso con la Unión Europa para lograr que Bruselas y la OTAN respalden de una forma más decidida su intervención en la guerra de Siria. Así, en un comunicado, el Ejecutivo de Recep Tayyip Erdogan informó ayer de que 76.000 migrantes se han desplazado hacia las fronteras de Bulgaria y Grecia con el objetivo de entrar en territorio comunitario. La Organización Internacional para las Migraciones constató el sábado por la noche que más de 13.000 personas ya habían llegado a Ipsala, a 80 kilómetros de la frontera. Mientras, en la isla de Lesbos aumenta la llegada de pateras con migrantes. Habitantes del lugar atacaron a voluntarios de ONG y periodistas para evitar desembarcos. Ante esta situación, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas, Frontex ha reforzado su personal en Grecia. “Nuestra máxima prioridad en esta etapa es garantizar que Grecia y Bulgaria tengan todo nuestro apoyo. Estamos dispuestos a proporcionar apoyo adicional”, manifestó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

Mientras, el viceministro de Defensa griego, Alkiviadis Stefanis, comunicó que cerca de 10.000 personas ya han intentado cruzar a Grecia desde Turquía, aunque afirmó que todos los intentos han sido frustrados por las fuerzas de seguridad helenas.

Habitantes de Lesbos agreden a voluntarios de ONG para que no desembarquen migrantes

La apertura de las fronteras europeas de Turquía para los refugiados se produce mientras el régimen de Ankara lucha contra Bashar Al Assad por el control de Idlib. A este respecto, las autoridades turcas, cuyas fuerzas actúan en Siria coaligadas con rebeldes, aseguraron ayer haber “neutralizado” a 2.212 soldados de Damasco. Abatieron además dos aviones de Al Assad, en una escalada de tensión que no deja de crecer.