EEUU y Canadá cierran su frontera común

Los gobiernos de Estados Unidos y Canadá acordaron ayer el cierre parcial de su frontera común prohibiendo el “tráfico no esencial” para contener la expansión del coronavirus, que suma ya más de 6.500 contagios en la parte estadounidense y que, en el lado canadiense, cuenta con 600 infectados, entre los que se encuentra la esposa del primer ministro, Justin Trudeau.

“Por acuerdo mutuo, cerraremos temporalmente nuestra frontera norte con Canadá al tráfico no esencial. El comercio no se verá afectado”, anunció el presidente estadounidense, Donald Trump, en su cuenta de Twitter. Por su parte, el primer ministro canadiense confirmó que dicho cierre estará en vigor “el tiempo que se considere necesario” y aclaró que la restricción no afectará a las cerca de 200.000 personas que cruzan habitualmente la frontera por razones laborales. El Gobierno canadiense se había resistido hasta ahora al cierre de la frontera con Estados Unidos por el temor que la medida cause el colapso del comercio entre los dos países, cifrado en 628.000 millones de dólares al año.

Pos su parte, Turquía, que ayer confirmó su primer muerto por coronavirus, anunció que impedirá la entrada a su territorio desde Grecia y Bulgaria, solo tres semanas después de abrir sus fronteras a los migrantes que quisieran pasar a la Unión Europea, para intentar prevenir la expansión de la pandemia.

Los tres pasos fronterizos con Bulgaria y los dos con Grecia, además de la conexión ferroviaria, quedaron clausuradas esta medianoche para las personas, aunque se continúa permitiendo el tránsito de mercancías sin restricciones.

Mientras, Oxfam alertó de una “devastadora crisis” si el Covid-19 llega a los campos de refugiados en las islas griegas cuya precaria situación se ha visto deteriorada en las últimas semanas por el nuevo pulso migratorio de Turquía a la UE. La ONG avisó que la mayoría ya se encuentran en un estado físico debilitado y no cuentan con acceso a la atención médica básica.