Mata a su mujer tirándola por la ventana tras una pelea en Valladolid

Una mujer de 56 años murió asesinada en la madrugada de ayer en Valladolid en el que sería el tercer crimen machista desde que se decretó el confinamiento por la pandemia de coronavirus. La víctima se precipitó desde una ventana de su domicilio después de protagonizar una discusión con su pareja. Los hechos ocurrieron pasadas las dos y cuarto de la madrugada, cuando los vecinos alertaron de una fuerte trifulca en la vivienda, situada en la parte alta del barrio vallisonetano de Pajarillos. Explicaron que la mujer estaba asomada a una de las ventanas del inmueble, ubicado en un tercer piso. Mientras llegaban los servicios de emergencia, los vecinos hicieron acopio de colchonetas para tratar de amortiguar el golpe por si la mujer caía al vacío. Finalmente, se precipitó y, pese a los colchones, la fuerza del impacto le produjo la muerte. A su llegada, los sanitarios solamente pudieron certificar el deceso.

Los agentes de la Policía Local de Valladolid y de la Policía Nacional encontraron en el domicilio familiar a la pareja de la fallecida a un hombre de 44 años que, hacia las cinco de la madrugada, fue detenido por un presunto caso de violencia de género. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, confirmó que se trata de un nuevo crimen machista, aunque la investigación continúa abierta. Según explicaron algunos vecinos, las peleas entre la pareja eran fuertes y constantes, aunque no constaban denuncias previas por malos tratos. Entretanto, los resultados de la autopsia que se le ha practicado al cuerpo de la víctima revelaron que la mujer no tenía lesiones compatibles con una agresión y sólo presentaba las producidas por el impacto mortal en la caída.

Los vecinos afirman que las peleas eran constantes entre la pareja pese a no haber denuncias previas

Por otra parte, un joven de 22 años fue arrestado el jueves en Madrid por agredir en varias ocasiones a su madre en el interior del domicilio que ambos comparten, en el barrio de Tetuán. La progenitora aprovechó que su agresor abandonó el inmueble el jueves por la noche, a pesar de las restricciones de movimiento por el estado de alarma, para avisar a los servicios de emergencia. Mientras agentes de la Policía Local de Madrid hablaban con la mujer, visiblemente nerviosa, regresó su hijo al domicilio. Durante el cacheo policial, los agentes detectaron que portaba consigo un cuchillo de catorce centímetros de hoja y otros tantos de mango, y fue detenido.