La peor matanza en la historia de Canadá acaba con 18 fallecidos

Gabriel Wortman, un hombre de 51 años de la localidad costera de Portapique, en la provincia canadiense de Nueva Escocia, perpetró el domingo la peor matanza en la historia de este país. Durante doce horas sembró el caos en este pequeño pueblo, que tiene unos cien habitantes, y acabó con la vida de 18 personas. El tirador, que también murió abatido al término del ataque, se disfrazó de policía para no levantar sospechas. La Policía canadiense dio la voz de alarma en la madrugada del domingo, hora local, cuando informó de que buscaba un sospechoso armado al volante de un vehículo y que iba vestido de policía, pese a no pertenecer al cuerpo. Minutos antes, respondiendo a una llamada a los servicios de emergencia, los agentes habían irrumpido en una vivienda, en la que encontraron varios cadáveres. Posteriormente, encontraron más cuerpos tirados por la zona. Entre los fallecidos hay una agente de la Policía de 23 años. Así, no se descarta que todavía puedan aparecer más víctimas mortales. Casi doce horas después, lo localizaron a Wortman en una gasolinera de la localidad de Enfield, a poco menos de 100 kilómetros de Portapique, donde fue abatido.

Chris Leather, portavoz de la Gendarmería Real canadiense, explicó que todavía se están investigando los motivos del ataque. En este sentido, indicó que las víctimas “no parecen tener ningún vínculo con el tirador” y que “al parecer, al menos en parte, actuó de forma aleatoria”. Con todo, añadió que “el hecho de que este individuo tuviera un uniforme y un coche de Policía a su disposición ciertamente hace pensar que no es un acto improvisado”. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, lamentó el ataque y lo calificó de “situación terrible”. “Mi corazón está con todos los afectados”, concluyó.

El atacante, un hombre de 51 años, se disfrazó de agentes y conducía un vehículo logotipado

A diferencia de lo que sucede en los Estados Unidos, donde los tiroteos con multitud de víctimas mortales son relativamente frecuentes, en Canadá es mucho más extraño que sucedan episodios como el del domingo en Portapique. De hecho, nunca antes en la historia canadiense se había registrado un asesinato múltiple tan mortífero como este. Hasta la fecha, el peor tiroteo se había registrado en diciembre de 1989 en la ciudad de Montreal, cuando un criminal acabó con la vida de 15 mujeres. El último tiroteo múltiple en Canadá había sido en agosto de 2018. En él murieron cuatro personas, incluidos dos agentes de la Policía.