ENERGÍA MERCADOS
El Brent se desploma cerca del 30% contagiado por la crisis del texano
El americano ha llegado a cotizar en negativo por primera vez en la historia|| La caída en gasolina y gasóleo será muy inferior con un precio marcado por impuestos
Un consumidor se dispone a rellenar el depósito de su vehículo.
El precio del petróleo de calidad Brent, de referencia para Europa, llegó ayer a caer más de un 28% para cotizar por primera vez en los últimos 18 años por debajo del umbral de los 20 dólares por barril, después de que el crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia en Estados Unidos, llegase el lunes a cotizar en negativo y en la sesión de ayer registrara un precio cercano a cero.
En lo que va de año, el petróleo de referencia en Europa acumula una caída superior al 72%.
El 52% del precio de los combustibles en España corresponde a impuestos indirectos
En el caso del WTI, el barril de petróleo americano cotizaba este martes levemente en positivo, tras el descalabro del lunes, registrando un precio de 0,01 dólares por unidad, aún así muy por encima de los -37,60 dólares del cierre negativo del lunes.
No obstante, los futuros del barril de Texas para entrega en junio se situaban en 16 dólares, un 21% por debajo del cierre del lunes, mientras que en el caso de los barriles para su entrega en julio el precio alcanzaba los 22,98 dólares, un 12,5% menos que el lunes.
El propio presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pidió a los responsables de los departamentos de Energía y del Tesoro la elaboración de un plan de asistencia al sector petrolero estadounidense que ponga a disposición de las empresas los fondos necesarios y permita mantener el empleo ante la crisis desencadenada por el hundimiento de la demanda a raíz de la pandemia, lo que ha provocado un histórico desplome de los precios del crudo y amenaza la supervivencia de muchas empresas del sector.
El precio del petróleo cae desde principios de año. Ante esta situación, la OPEP y Rusia acordaron reducir la producción en diez millones de barriles diarios. Sin embargo, el pacto no ha logrado detener el descenso porque no compensa la caída en picado de la demanda.
El precio del barril de Brent está ligado al importe que el consumidor termina pagando en la gasolinera. Aún así, hay un parte fija que no varía, la de los impuestos, que en el caso de España representa el 52 por ciento del precio total.
Además, a estos impuestos se han de añadir los costes de refinado del crudo en combustibles, por lo que el descenso de la cotización del petróleo tarda, y mucho, en repercutir al precio de la gasolina y del gasoil, por lo que el consumidor final no termina beneficiándose de toda la caída del crudo.
