Alemania sigue con la desescalada pese al temor a nuevos rebrotes

Una nueva desescalada de las medidas contra la pandemia del coronavirus entró ayer en vigor en Alemania con reaperturas de escuelas, comercios, actividades deportivas en grupo, con ritmos regionales diferenciados y entre el temor a que haya un repunte de los casos.

Las últimas cifras del Robert Koch Institut crearon cierta preocupación al mostrar que el factor de reproducción de la enfermedad (R) –que indica a cuántas personas contagia un infectado– había vuelto a subir por encima de 1. El ministerio de Sanidad aseguró que el aumento de R no quiere decir que la situación se haya salido de control.

En la mayoría de los estados federados antes solo podían abrir los comercios con menos de 800 metros cuadrados de superficie, lo que había sido impugnado por algunos tribunales.

Ahora esa limitación de superficie desaparece y todos los comercios pueden abrir aunque con limitaciones en cuanto al número de clientes que estén al mismo tiempo en una tienda.

Alemania ha registrado, desde el comienzo de la pandemia, 172.658 casos confirmados de coronavirus; 142.686 pacientes han superado la enfermedad y 7.681 han muerto.

Mientras, Francia vivió ayer su primera jornada sin algunas de las medidas que el Gobierno había decretado hace más de 50 días para contener la pandemia de coronavirus. Las colas en algunos comercios y un sistema de transporte más frecuentado que en días pasados marcaron esta reapertura gradual de la actividad económica y social.

La mayoría de las tiendas reabrieron sus puertas, al igual que también se reanudó la labor en oficinas que hasta ahora habían permanecido cerradas o dependientes del teletrabajo. En algunas regiones del país, sin embargo, se establecieron condiciones especiales por tratarse de los principales focos de una pandemia que ya ha sumado en Francia más de 26.000 fallecidos.