?PROCÉS? PARTIDOS
ERC insiste en reactivar el diálogo pero Sànchez desconfía de Moncloa
El exlíder de la ANC cree que Madrid trata de dividir al independentismo con la mesa || Aragonès afirma haber hablado con Torra sobre la fecha de las elecciones
El final del estado de alarma por el coronavirus y la entrada en la “nueva normalidad” han colocado de nuevo al procés en la agenda política, con la segunda reunión de la mesa de diálogo entre el Estado y Catalunya como uno de sus hitos más acuciantes. Sin embargo, ERC y La Crida Nacional per la República evidenciaron ayer sus diferencias a la hora de retomar la negociación con el Gobierno central. Así, el vicepresident de la Generalitat y coordinador nacional de ERC, Pere Aragonès, urgió a reactivar la mesa de diálogo cuanto antes. “Si es la primera semana de julio, mejor que el 20 o el 25”, manifestó en declaraciones a Catalunya Ràdio. El dirigente republicano, además, subrayó que las conversaciones han de versar sobre la autodeterminación de Catalunya y la amnistía para los líderes independentistas condenados por el 1-O. En cambio, Jordi Sànchez, exlíder de la ANC y presidente de La Crida, sostuvo que La Moncloa “especula” con el diálogo a fin de “dividir” a los independentistas. En una entrevista en el Ara, afirmó que “apuesta” por la vía negociada pero exigió saber para qué van a servir las reuniones con Madrid. “Yo estoy por el diálogo y creo que la inmensa mayoría de dirigentes y de electores de JxCat están por el diálogo. Lo que tenemos que preguntarnos es si esta mesa realmente busca resolver un conflicto político o es la excusa para aparentar que dialogaremos, para hacer una fotografía y justificar una mayoría gubernamental en España”, explicó Sànchez.
En otro orden de cosas, el conseller de Interior, Miquel Buch descartó “pensar en unas elecciones” porque es “de sentido común” estar centrados ahora en la gestión del coronavirus. “Si ahora nos metemos en unas elecciones, si ahora estamos en funciones y más pendientes de quién gana las elecciones, en lo que no pensaremos es en cómo hacer frente a la Covid-19”, manifestó. Por contra, el vicepresident Aragonès dijo que “sería malo” que el Tribunal Supremo fijara la fecha de las elecciones catalanas, en alusión a la posibilidad de que los magistrados confirmen la condena por desobediencia impuesta por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) al president, Quim Torra. A este respecto, insistió en que la fecha ha de ser “consensuada” y desveló que ya ha hablado de esta cuestión con el propio president. “No tenemos ninguna predilección por la fecha”, afirmó el republicano, que no quiso aclarar si será él mismo el candidato de ERC.