El decreto de la “nueva normalidad” se aprueba con amplia mayoría, incluido el PP

El Gobierno consiguió ayer sacar adelante en el Congreso el decreto que regula el periodo de “nueva normalidad” iniciado tras el fin del estado de alarma. Lo hizo con los votos a favor de PP y Ciudadanos, entre otros; mientras que Vox y formaciones independentistas como Junts per Catalunya, ERC y Bildu lo rechazaron.

La norma fue convalidada en el Congreso con los 265 votos a favor de PSOE, Unidas Podemos, PP, Cs, PNV, Más País, PRC, UPN y Coalición Canaria. Recibió 77 surfagios en contra de Vox y los independentistas de Junts per Catalunya, ERC y Bildu y 5 abstenciones, entre ellas la de Compromís.Ahora se seguirá tramitando en la Cámara como proyecto de ley, de manera que los grupos podrán presentar enmiendas. Así lo han decidido los diputados en una segunda votación tras la convalidación del texto.

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, encargado de defender el decreto, agradeció el apoyo de los grupos a un decreto. La norma busca establecer medidas de prevención en esta nueva fase, así como instrumentos legales para garantizar una respuesta coordinada en todo el país frente a un virus que sigue al acecho. Una vez finalizado el estado de alarma por la Covid-19, fijará el marco legal para prevenir, contener y coordinar las actuaciones que permitan seguir haciendo frente a la crisis sanitaria hasta que la pandemia se declare oficialmente finalizada.

De acuerdo con el decreto, la mascarilla será obligatoria hasta que haya una vacuna, en espacios cerrados, transporte público y en las zonas donde no se cumpla el distanciamiento social, además de tener en cuenta la responsabilidad individual. Su uso será obligatorio a partir de los seis años de edad, tal como lo era hasta ahora, y las personas que no cumplan con dicha norma podrán ser multados con cien euros.

Durante la nueva normalidad se deberá incentivar el teletrabajo y, de no ser posible, se deberán establecer turnos para evitar las aglomeraciones en los lugares de trabajo. En el transporte público se deberá cumplir con el aforo y los viajeros deberán ocupar los asientos que se les asigne al comprar el billete.

Las residencias de ancianos deberán contar con un plan por si se da algún rebrote y serían las encargadas de dar aviso al departamento de Salud de cada comunidad. En escuelas y hospitales también serán las autonomías las que decidirán las medidas más concretas que se tengan que tomar en dichas instalaciones. La vigencia de estas y otras medidas se se prolongará hasta que el Gobierno estatal declare que la crisis sanitaria ha concluido.