Los presos de JxCat plantean la disolución del PDeCAT y la dirección del partido lo rechaza

ACNACN

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BARCELONA

Los líderes presos de JxCat, Jordi Turull, Josep Rull y Joaquim Forn, así como Lluís Puig, exiliado en Bélgica, plantearon ayer la disolución del PDeCAT. Lo hicieron en el marco de una propuesta para convocar una asamblea constituyente de JxCat en la que participen todos los electos de este espacio político, sean o no militantes de un partido. El objetivo es crear una nueva formación independentista liderada por Carles Puigdemont. Este aplaudió la iniciativa, mientras que la dirección del partido posconvergente se apresuró a expresar su rechazo.

Frente al rechazo de la dirección del PDeCAT, que preside David Bonvehí, también hubo miembros de JxCat que se mostraron de acuerdo con la propuesta de los presos, como la consellera de Presidencia de la Generalitat, Meritxell Budó; o el primer teniente de alcalde del ayuntamiento de Lleida, Toni Postius. Este último definió la propuesta como “una herramienta transversal y de país para la independencias sin partidismos”.

El PDeCAT se emplazó a seguir negociando con la Crida Nacional per la República, que preside Jordi Sànchez, para intentar acercar posiciones en la reorganización de este espacio político. En el debate se confrontaron la posición de Bonvehí y otros miembros de la dirección, que defienden conservar el partido; y los partidarios de crear una sola formación. Entre estos últimos están los presos y los afines a Puigdemont. El exdiputado en el Congreso y desde el jueves ex militante del PDeCAT Jordi Xuclà cargó contra los independientes de JxCat, a los que acusó de “marcar el paso” del PDeCAT y de “alejarlo” de su ideología.

La propuesta de Bonvehí a la Crida consiste en presentarse en coalición como JxCat y repartirse al 50% la dirección y los puestos en la lista electoral, mientras que Sànchez pide crear una nueva organización política sin cuotas ni vetos. El riesgo de la fractura en el espacio postconvergente llega marcada por la escisión en el suplicatorio de Laura Borràs, mientras que el ingreso en prisión de Millet ha puesto de nuevo de actualidad el caso del tres per cent.

BARCELONA

La consellera de la Presidencia, Meritxell Budó, afirmó ayer que el Govern debe ser capaz de “aislarse del ruido de los partidos”, en relación a las diferencias que los socios de gobierno mostraron el jueves en el Congreso durante la votación del suplicatorio de la portavoz de JxCat en la Cámara baja, Laura Borràs.

En declaraciones a TV3, la consellera de la Presidencia aseguró que hasta ahora JxCat y ERC, han sido capaces “de aparcar” las diferencias en la gestión de la pandemia y de ir “a una” para afrontar “el esfuerzo titánico” que suponía luchar contra ella. Añadió que episodios como el ocurrido en el Congreso, cuando republicanos y también la CUP decidieron ausentarse para no votar el suplicatorio de Borràs, lo que abrió la puerta a la investigación penal contra ella, deben quedar “al margen” de la acción del Govern. Budó quiso echar tierra sobre las constantes discrepancias entre Junts y Esquerra y afirmó que “a pesar del ruido, quiero poner en valor la capacidad de entendimiento a la hora de tomar decisiones y trabajar conjuntamente.

Sobre las discrepancias durante el suplicatorio de Borràs también se pronunció la Assemblea Nacional Catalana (ANC), que lamentó que los partidos independentistas fueran incapaces de mostrar una unidad “sin fisuras”. La entidad presidida por Elisenda Paluzie argumentó que ante la voluntad de “reprimir” y “descabezar” el independentismo que ha mostrado la justicia española había que estar unido. “No ha sido así, y eso nos debilita colectivamente”, señaló. La entidad también envió todo su apoyo a Borràs, a la que prometieron que siempre estaría a su favor. También apuntó que su actuación sólo habría sido valorada “con justicia” en un Estado independiente.

En este sentido, defendió que cada día sin llegar a la independencia “nos somete a una justicia vengativa que quiere destruir al adversario político y acabar con el independentismo”.

‘Responsables del caso Palau deben explicar cómo devolver el dinero’ La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, afirmó ayer que, en el caso Palau, “las personas responsables condenadas por el expolio deben explicar cómo se devuelve el dinero” y no solo cumplir prisión. Hizo estas declaraciones tras el ingreso en prisión el jueves del expresidente del Palau de la Música Fèlix Millet y del extesorero de Convergència Democràtica de Catalunya Daniel Osàcar. “Quien la hace, la paga”, dijo, y defendió que las responsabilidades políticas las deben asumir los responsables de ese momento. Aseguró que no se siente ni parte ni heredera de esta gestión. “Yo no lo asumiré como propio”, aseveró.