Los presos estrenan su semilibertad

Los nueve presos del procés, Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Dolors Bassa, Carme Forcadell, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, abandonaron ayer las cárceles de Lledoners, Wad-Ras y Puig de les Basses para pasar el fin de semana en sus casas entrenando así su recién concedida semilibertad. Algunos de ellos, como Junqueras o Forn, disfrutaron por primera vez en más dos años y medio de su primera noche fuera de la cárcel.

Tras abandonar las prisiones, a primera hora de la mañana, todos coincidieron en declarar que pese a sentirse felices por volver a pasar la noche en sus casas, volver a abrazar a sus familias y disfrutar de unos días fuera “no son libres”, sino que siguen cumpliendo condena “por culpa de la represión política”. Asimismo algunos como los exconsellers Josep Rull y Jordi Turull afirmaron que esperan que el tercer grado sea revocado pronto porque la Fiscalía y el Tribunal Supremo “solo se mueven en parámetros de venganza”. La Fiscalía, que hasta ahora ha recurrido todos los permisos y medidas de flexibilización del régimen penitenciario de los presos, ya anunció de recurrir la semilibertad, por lo que deberá ser el Supremo, el organo condenador, el que tenga la última palabra.

Turull y Rull esperan que se les revoque pronto porque la Justicia española “ se mueve por venganza”

Tras salir a la calle Junqueras hizo una llamada al president del Govern, Quim Torra, para preocuparse por su estado e informarle “que está a disposición del Govern”. Por su parte, Jordi Cuixart, fue recibido en la sede de Òmnium Cultural, entidad que preside, con un acto multitudinario en el que hizo un llamamiento a la “unidad” y a presionar para que los políticos escuchen “la voz de la ciudadanía”. Actos similares fueron organizados para el resto de los líderes independentistas, pero la situación de la pandemia obligó a cancelarlos. Esto no impidió que algunos de ellos como Romeva o Junqueras fueran recibidos en sus municipios por pequeños comités de bienvenida.

El tercer grado les permitirá pasar tres noches en casa, por lo que no volverán a la prisión hasta el lunes. A partir de entonces los nueve deberán acudir a la cárcel sólo a dormir de lunes a jueves.

Paralelamente, el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya pospuso hasta el 23 de septiembre la comparecencia como investigado de Torra por su segunda causa por desobediencia.