POLÍTICA ECONÓMICA
Los líderes europeos buscan un acuerdo tras un nuevo recorte de las ayudas directas
El fondo de recuperación pasaría a tener 390.000 millones en subvenciones y estaría condicionado a cumplir ciertas reformas || Los países “frugales” mantienen las reticencias ante las demandas del sur
Los líderes de la Unión Europea trataban anoche al cierre de esta edición de alcanzar un acuerdo para el fondo de recuperación tras la pandemia y el presupuesto comunitario, en el cuarto día de la cumbre de mandatarios celebrada en Bruselas. La última propuesta la hizo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y reducía las ayudas directas a 390.000 millones de euros, frente a un documento incial de medio billón, mientras que 360.000 millones corresponderían a créditos. De esta forma, mantenía el montante total que había planteado la Comisión Europea, los 750.000 millones, pero con un reparto muy diferente, dado que reducía un 22% la parte más importante, las ayudas directas que no hay que devolver. El recorte en el volumen de subvenciones ha sido desde el inicio una de las principales demandas de los cuatro países denominados “frugales” (Países Bajos, Austria, Suecia y Dinamarca), junto a Finlandia, frente a las demandas de los países del sur, encabezados por España e Italia. Además, para acceder a esas ayudas, habría que acometer ciertas políticas en favor, por ejemplo, del recorte del déficit.
El Instrumento para la Recuperación y la Resiliencia, pilar fundamental del fondo que servirá para financiar las reformas e inversiones que propongan los países y que interesa mucho a España, aumentaría su dotación hasta los 672.500 millones, frente a los 560.000 millones planteados por la Comisión.
Los líderes de la UE mostraron ayer cierto “optimismo” de cara a lograr un acuerdo
La última propuesta de Michel aumenta los descuentos que reciben los países frugales en su contribución al presupuesto comunitario por aportar mucho más de lo que reciben. Esto repercutirá en 1.069 millones anuales para esos cuatro países. Estos planteamientos deben ser aprobados por mayoría cualificada en el Consejo (al menos 15 Estados miembros que representen el 65 % de toda la población de la UE).
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, uno de los líderes más críticos con los países frugales por aspirar a rebajar las ayudas y tener poder de bloqueo sobre ellas, aseguró que confiaba en que las “tergiversaciones” quedaran atrás y se avanzara hacia un acuerdo “vital”. En este mismo sentido se pronunciaron la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, asegurando que existían “esperanzas” para el pacto. Con todo, las negociaciones se mantenían muy difíciles y se auguraba una nueva madrugada de ofertas y contraofertas.
Este mensaje llegó horas después de la tercera reunión de los líderes políticos en la que se vivieron los episodios de mayor tensión, con los países del norte (Países Bajos, Dinamarca, Suecia, Austria y Finlandia) pidiendo más recortes y el resto de socios acusándoles de “instrumentalizar” y “bloquear” la negociación a lo largo de la cumbre.
Sánchez confía en un pacto bueno para mercados y ciudadanos El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confió a su llegada a la cuarta jornada de negociación en Bruselas en que los líderes de la Unión Europea lograrían finalmente cerrar un acuerdo de “envergadura” sobre el plan de recuperación post-Covid, porque, según él, va a “sentar muy bien” tanto a los mercados como a la ciudadanía. “Tenemos que dar una respuesta que dé certidumbre, que dé tranquilidad, sosiego y serenidad tanto a empresas y trabajadores como al conjunto de la ciudadanía para poder afrontar con todas las garantías de la pandemia”, defendió.