Torra critica la “represión” de Sánchez y dice que pretenden inhabilitarle “por venganza”

El president de la Generalitat, Quim Torra, arremetió ayer contra la “represión” del Gobierno de Pedro Sánchez y denunció que los tribunales españoles quieren inhabilitarle “por venganza” hacia el independentismo. Así, al inicio del debate de política general en el Parlament y en vísperas de comparecer hoy ante el Supremo, que ha de decidir si confirma o no la condena de inhabilitación que le impuso el Superior de Justicia catalán por no retirar los lazos amarillos de los edificios del Govern antes del periodo electoral de las generales del 28 de abril del año pasado, el president lamentó que el Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos haya mantenido la “represión” hacia Catalunya iniciada durante la etapa de Mariano Rajoy en La Moncloa. “Hay un Estado instalado en la venganza que me quiere inhabilitar”, remarcó Torra, que lamentó que España emplee “toda la maquinaria” en su contra para sostener el “círculo de represión” contra los independentistas. El president, cuya inhabilitación podría ser confirmada de forma inminente, aprovechó la ocasión para hacer balance de la legislatura y defendió su gestión de la pandemia, reclamó a Madrid que ponga fin a la “asfixia económica” de la administración catalana y lamentó el déficit del Estado en inversión en infraestructuras en Catalunya. Con todo, Torra no se pronunció sobre una futura convocatoria electoral en caso de que sea inhabilitado y advirtió de que servirá “al país hasta las últimas consecuencias”. Además, aprovechó para anunciar la apertura de nuevas delegaciones de la Generalitat en Australia y Nueva Zelanda, Japón y Senegal.

El líder de JxCat en el Parlament, Albert Batet, fue el único que suscribió las tesis del president, ya que ERC y la CUP urgieron a consensuar la repuesta ante su posible inhabilitación. De esta forma, Batet dijo que fijar una fecha para los comicios “no es la solución” porque “la gente no pide elecciones”. Así, apostó por la “confrontación inteligente” con el Estado que propuso Carles Puigdemont. Por su parte, Sergi Sabrià, portavoz de ERC, advirtió que el tiempo para “pactar una respuesta” se acaba. “No podemos llegar a la inhabilitación divididos”, manifestó el republicano, que defendió la mesa de diálogo e instó a los partidos independentistas a que no la abandonen. Sobre la segunda reunión de esta mesa se refirió, fuera del hemiciclo, la vicepresidenta primera del Gobierno central, Carmen Calvo, que dejó claro que Torra no podrá participar en los encuentros si el Supremo le inhabilita. También lejos de la Cámara catalana hablaron del diálogo el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, y el vicepresidente segundo del Ejecutivo, Pablo Iglesias, que constataron “buena sintonía”. Rufián dijo que, si la mesa no se ha reunido, no ha sido por ERC. Entretanto, Carles Riera, de la CUP, desde la tribuna del Parlament también pidió elecciones para abrir un “nuevo ciclo”.

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Pese a las discrepancias, JxCat, ERC y la CUP acordaron una propuesta de resolución, que se votará mañana, en la que condenan la posible inhabilitación del president.

Cs y PP avisan al president: ‘No bloquearás Catalunya’ Ciudadanos y el Partido Popular avisaron ayer al president, Quim Torra, que no permitirán que “bloquee” Catalunya si, tras ser inhabilitado por el Tribunal Supremo, se niega a abandonar la jefatura de la Generalitat. De este modo, el líder naranja en el Parlament, Carlos Carrizosa, invitó a negociar negociará al resto de la oposición para encontrar “fórmulas” que “eviten que Torra se salga con la suya y bloquee Catalunya” después de su inhabilitación “No te saldrás con la tuya”, le advirtió Carrizosa a Torra. En la misma línea, el presidente del PP catalán, Alejandro Fernández, exigió a Torra no llevar a Catalunya al “bloqueo” por su “decisión personal” de desobedecer las resoluciones de la Junta Electoral. De esta forma, el dirigente popular remarcó que, si Torra es inhabilitado, no puede permanecer al frente de la Generalitat un Govern en funciones sin capacidad para legislar.