TRIBUNALES CORRUPCIÓN
Rodrigo Rato consigue el tercer grado penitenciario
Dormirá en su casa con una pulsera telemática || El Congreso investigará la 'Operación Kitchen' con la oposición del PP
El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional concedió ayer el tercer grado al expresidente de Bankia Rodrigo Rato bajo control telemático, dos días después de conocer la sentencia que le absuelve por la salida a Bolsa de la entidad que dirigió.
En un auto, el magistrado José Luis Castro señala que la propia Junta de Tratamiento del centro penitenciario de Soto del Real ha propuesto por mayoría su progresión al tercer grado, al entender que está capacitado para seguir cumpliendo su condena en un régimen de semilibertad. Para ello, se basa en los informes emitidos por los profesiones del equipo técnico del centro penitenciario.
El único control que se le impone es estar siempre localizable mediante una pulsera electrónica
El ex vicepresidente económico en el Gobierno de José María Aznar entró en prisión en octubre de 2018 cuando el Tribunal Supremo confirmó la condena impuesta por la Audiencia Nacional a cuatro años y medio por el caso de las tarjetas ‘black’ de la extinta Caja Madrid, siendo el único de los condenados que aún continúa en prisión. Al haber cumplido ya una cuarta parte de la condena, en abril la junta de tratamiento de la prisión propuso concederle el tercer grado, si bien un mes más tarde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del ministerio del Interior, se negó, entre otros motivos, porque aún tenía pendiente dos procedimientos judiciales, uno de ellos, la sentencia por la salida a Bolsa de Bankia en 2011 que se conoció el martes y que absuelve a los 34 acusados.
Por otra parte, el Pleno del Congreso aprobó ayer la creación de una comisión de investigación sobre la denominada ‘Operacion Kitchen’, el operativo que supuestamente se montó desde el ministerio del Interior en la etapa de Jorge Fernández Díaz para espiar al extesorero del PP Luis Bárcenas y recabar pruebas que pudieran implicar a dirigentes populares.
La iniciativa salió adelante con el voto en contra del PP, sólo secundado por Foro Asturias, mientras que Vox y Coalición Canaria decidieron abstenerse.