Argimon pide no avanzar fases de la desescalada antes del puente

El secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, apostó ayer por no avanzar de fase en la desescalada que comenzó el lunes antes del puente de diciembre. En declaraciones a TV3, dijo que “tenemos que ser serios” y remarcó la necesidad de prolongar las medidas actuales más allá del 7 de diciembre, momento en el que, en principio, se tendría que pasar a la segunda fase de la desescalada, lo que implica una mayor relajación de las medidas. Argimon confía en que esta semana acabe con unos 7.000 contagios de lunes a domingo, a razón de un millar diarios, un número similar al que tenía Catalunya justo antes de la última ola del coronavirus. Sin embargo, en las unidades de cuidados intensivos (UCI) hay aún 484 ingresados, “que no bajan al mismo ritmo que el de los contagios”. A este respecto, la Generalitat notificó ayer 1.582 nuevos casos, de los que 1.469 fueron confirmados con PCR o test de antígenos. Además, hubo tres nuevos fallecimientos. En este contexto, hizo un llamamiento a la responsabilidad y dijo que está sobre la mesa la posibilidad de “flexibilizar” algo las medidas de cara a Navidad. Apostó por mantener en 10 el máximo de personas que se pueden reunir.

Mientras tanto, y a diferencia de lo que manifestó Argimon, el conseller de Interior, Miquel Sàmper, avanzó que el confinamiento municipal de los fines de semana no se prolongará “en principio” más allá del 7 de diciembre. En paralelo, Jacobo Mendioroz, coordinador del seguimiento de la Covid, dijo que trabajan para mejorar los rastreos con inteligencia artificial.

Negocios abiertos por la falta de dinero para ayudasLa consellera de Salud, Alba Vergés, el secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon y el director del CatSalut, Adrià Comella, reconocieron ayer que la Generalitat ha permitido el inicio de la desescalada de la medidas contra el coronavirus porque no disponía de suficiente dinero para ayudar a los sectores económicos que estaban cerrados. En este sentido, Vergés lamentó la falta de implicación del Gobierno español y urgió a Moncloa a trabajar para que la ciudadanía pueda gestionar la pandemia cuando afecte “directamente” a su actividad económica. “Necesitamos tener la certidumbre de que habrá ayudas de Estado”, sentenció.