Salud avisa de que el pico en las UCI llegará pocos días antes del 14-F

La conselleria de Salud avisó ayer de que el pico de ocupación por coronavirus en las unidades de cuidados intensivos (UCI) de los hospitales catalanes se podría alcanzar pocos días antes de las elecciones del 14-F. Cuando partidos e instituciones todavía no han decidido si los comicios tendrán o no lugar en la fecha prevista debido a la pandemia, el departamento de Alba Vergés puso ayer sobre la mesa esta advertencia e indicó que, en función de la evolución de la situación sanitaria, el punto máximo de presión asistencial en las UCI podría llegar el 4 de febrero, con 640 pacientes ingresados, o el 10 de febrero, con 850. Y ello sin tener en cuenta el posible impacto de la nueva cepa británica, que se transmite con mayor facilidad.

El informe de Salud fue presentado ayer en una nueva reunión de partidos y Govern de cara a decidir si las elecciones se podrán celebrar. En este encuentro participó por primera vez el PDeCAT, y tanto esta formación como la oposición urgieron a tomar ya la determinación de seguir o no adelante con los comicios, a la vez que abogaron porque se obedezcan criterios estrictamente sanitarios. Con todo, el vicepresident, Pere Aragonès, evitó anticipar la fecha de los comicios y dijo que este viernes se decidirá, cuando se terminen de analizar “todos los escenarios”. Entretanto, la Junta Electoral Central rechazó la petición de la Generalitat de excluir a las personas mayores de 60 años del sorteo para escoger las mesas electorales. Así lo manifestaron fuentes de la conselleria de Acción Exterior, que también añadieron que Salud sigue estudiando si es viable vacunar a las personas que resulten elegidas para estar en las mesas, tal y como se propuso al término de la última reunión de la mesa de partidos anterior a la Navidad.

El PDeCAT asistió ayer por primera vez a la mesa de partidos, tras la polémica del mes pasado con JxCat

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Mientras, el propio Aragonès negó por enésima ocasión que su partido se plantee pactar un Govern con el PSC tras el 14-F si dieran los números para ello. En cambio, insistió en un Executiu con el PDeCAT, JxCat, la CUP y los comunes, algo que la presidenciable de la formación morada, Jéssica Albiach, descartó nuevamente y tachó de Govern “Frankenstein”. En esto mismo hizo hincapié la candidata de los juntistas, Laura Borràs, que abogó por un Gabinete “fuerte” y que tenga “horizonte nacional”. “Ha de estar comprometido para avanzar hacia la independencia”; manifestó. Por otra parte, Primàries anunció que ha logrado reunir los avales necesarios para concurrir en las cuatro demarcaciones catalanas. Por el contrario, la Lliga Democràtica, cuya cara visible es Astrid Barrio, anunció que no se presentarán a las elecciones tras no haber conseguido cerrar un acuerdo de coalición con el PSC. En este sentido, achacó al nombramiento del ministro de Sanidad, Salvador Illa, como presidenciable de los socialistas, la ruptura de la negociación. El PSC solo irá de la mano de Units per Avançar, como ya ocurrió en el año 2017.