ERC explora con la CUP un pacto de izquierdas para investir a Aragonès

ERC y la CUP iniciaron ayer formalmente las negociaciones para intentar alcanzar un acuerdo de investidura tras las elecciones del 14F y concretar los próximos pasos del procés. Tres días después de los comicios, en los que el PSC fue la fuerza más votada pero empató a escaños (33) con ERC, con una mayoría absoluta independentista reforzada, Esquerra ha movido ficha en busca de los apoyos necesarios para investir antes del 26 de marzo a Pere Aragonès como president.

Tras este primer contacto, que sirvió para poner sobre la mesa sus puntos de vista sobre la situación económica y social de Catalunya y sobre los pasos que debe seguir ahora el proceso independentista, ambas formaciones se emplazaron a proseguir la negociación en un nuevo encuentro la próxima semana. En un comunicado, ERC destacó que en la reunión ambas formaciones coincidieron en “destacar tanto la victoria del independentismo como el hecho de que el movimiento político crece por la izquierda”, mientras que la CUP, en otro comunicado, remarcó que los resultados del 14F “evidencian una voluntad clara de la población de un giro hacia la izquierda en las políticas en Catalunya y de un avance hacia a la República Catalana”.

Las conversaciones, de hecho, no empezaron en el mejor clima. Antes del encuentro la CUP avisó de que la actuación de los Mossos durante las manifestaciones de apoyo al rapero Pablo Hasel “dificulta las negociaciones” con ERC y JxCat, puesto que “es muy difícil” generar unidad “cuando se ve esta brutalidad contra la disidencia política”.

Además, Endavant, una de las dos principales organizaciones de la formación anticapitalista, mostró su rechazo a formar parte de un Govern con republicanos y Junts. .

ERC, cuyo objetivo es lograr formar un Executiu de partidos que estén a favor de la autodeterminación y la amnistía, todavía tiene pendiente reunirse con los comuns y JxCat.

Recabar el apoyo de las dos formaciones resultará una tarea complicada, y es que la candidata de la formación morada, Jéssica Albiach, adelantó que votaran “no” a la investidura de Aragonès si hay un pacto con Junts, partido con el que se consideran incompatibles. También la portavoz de JxCat, Elsa Artadi, ve inviable la fórmula que sugiere Aragonès y rechaza incorporar a los comuns al Executiu, porque sería “contradictorio que hubiese fuerzas no independentistas en un Govern que busca la independencia”.